



¿Alguna vez has pensado invertir en bienes inmuebles?
Todos hemos escuchado las historias sobre cómo la casa en la que vivimos, en su momento, fue una excelente inversión. “Ni te imaginas que esta casa donde vivimos la compramos en 200 mil pesos…”; “tu tía es rica porque invirtió en departamentos en La Condesa cuando eran regalados…”; “la mejor inversión que he hecho en mi vida es esta casa…”, etc.
Estas historias, desde luego, tienen sesgos, como el hecho de que hayan transcurrido largos periodos de tiempo desde entonces, o que no se consideren los niveles de inflación de la época, entre otros aspectos que le quitan rigor técnico a esas afirmaciones.
Lo que sí es verdad es que los bienes inmuebles pueden ser una excelente alternativa para generar patrimonio a largo plazo para la mayoría de las personas, y a continuación te explico por qué:
Al ser bienes físicos, estos tienden a preservar su valor en términos reales, es decir, suben de precio por encima de la inflación. Lo cual lo vuelve especialmente importante en largos periodos de tiempo y también durante épocas de inflación alta como actualmente estamos viviendo.
Los bienes raíces son buenos candidatos para poder solicitar créditos hipotecarios, lo que mejora los retornos que podemos obtener financieramente. Adicionalmente los créditos hipotecarios están en tasas fijas nominales, por lo que a través del tiempo el apalancamiento va disminuyendo al subir el valor del activo.
Comprar un bien inmueble con el uso de una hipoteca nos obliga a destinar una buena parte de nuestros recursos al pago de la hipoteca y de esta manera controlar nuestra tentación de gasto discrecional. De este modo, ese dinero se deja de utilizarlo para otros fines que no nos agreguen valor.
Si quieres emprender como inversionista inmobiliario, también hay varias consideraciones que hay que tener en cuenta antes de iniciar en este campo. Conocerlas ayudará a aumentar la posibilidad de tener buenos retornos y generar un patrimonio inmobiliario:
Finalmente, debo aconsejar, y como una de las principales claves en los bienes raíces, que es necesario pensar a largo plazo. Tanto el inmueble como el crédito que vamos a tener pudieran estar con nosotros para los siguientes 10 a 20 años.
Es importante tener en consideración factores como la apreciación de la zona, la dinámica local, y el mercado de renta existente para la propiedad, entre otros factores. En el caso del crédito, tendremos que preguntarnos si la institución realmente me está apoyando o sólo quieren retenerme como cliente, además de saber si en realidad existe transparencia en los costos del crédito y lo que me ofrecen.
Este pensamiento de largo plazo e iniciar con un hábito de ahorro para amortizar el crédito puede ser lo que nos permita ser esa tía, pariente o conocido, que en unos años cuente la anécdota que compró a precios que sonarán irrisorios para el 2040 o 2050. Pero para eso siempre tiene que haber un primer paso.