



PORTO ALEGRE, BRASIL. Frete.com y Tiendanube comparten una raíz común: nacieron en Argentina, identificaron un problema estructural en sus industrias y decidieron resolverlo con tecnología. Se trata de dos startups que han alcanzado la valuación de unicornio y que se están expandiendo en México y otros países de Latinoamérica.
En entrevista en el marco de South Summit Brazil 2025, un evento coorganizado por IE University y celebrado del 9 al 11 de abril pasados, estos dos unicornios latinoamericanos comparten sus lecciones de crecimiento.
Antes, los camioneros dependían de acuerdos informales en gasolineras, esperando días para encontrar carga de retorno. Con Frete.com este problema se resuelve. La startup conecta camiones con cargas a través de una plataforma digital, lo que permite a los camioneros planificar viajes con carga de ida y vuelta, reduciendo tiempos muertos, costos y emisiones de carbono.
Hoy, el 90% de la flota de camiones pesados en Brasil está en la plataforma de frete.com y desde el año pasado la empresa opera en México, dice su fundador Federico Vega, fundador de Frete.com.
En el caso de Tiendanube, la misión fue simplificar el acceso al ecommerce. “Queríamos que crear una tienda online fuera tan simple como abrir una cuenta en una red social”, cuenta Alejandro Vázquez, su cofundador.
Tiendanube empezó dando herramientas a pequeños emprendedores. Hoy, más de 160,000 marcas, desde microemprendedores hasta retailers internacionales, usan Tiendanube para vender online. Además, su ecosistema incluye pagos, logística y atención al cliente. En México esta plataforma tiene 4,606 tiendas activas, lo que representa el 3.4% de su total a nivel global, con presencia en Brasil, su principal mercado; Argentina, Colombia y Chile.
Estos dos unicornios latinoamiericanos encontraron que la clave en los negocios es encontrar un problema relevante y resolverlo con tecnología simple, útil y escalable.
Los dos unicornios latinoamericanos apostaron por mercados complejos pero masivos desde el inicio. “Pensar en grande y pensar en chico cuesta lo mismo”, dice Federico. Para él, conquistar Brasil, con todo y su burocracia, fue una jugada estratégica: “Una vez que entiendes la complejidad, se vuelve una ventaja competitiva”. Tiendanube pensó igual: “Si queríamos impactar a millones de emprendedores, teníamos que salir de Argentina”, comenta Alejandro.
Ambos reconocen que lanzar en países como México o Brasil requiere paciencia y ejecución paso a paso. “Empezá vendiendo en tu ciudad, en tu estado. Después pensá en el país y más adelante, en el mundo”, recomienda el creador de Tiendanube.
El enfoque fue claro: pensar en grande, pero comenzar resolviendo un problema específico y escalar con foco. No se trata de correr rápido, sino de correr bien.
Frete.com y Tiendanube se volvieron unicornios, pero nunca lo usaron como meta. “Ser unicornio nunca fue un sueño. Fue una consecuencia”, explica Alejandro. Lo importante no era la etiqueta, sino tener los recursos correctos en el momento correcto.
Frete.com levantó 400 millones de dólares sin necesitarlos de inmediato. “El peor consejo fue no levantar plata si no la necesitás. Menos mal que no lo seguimos”, reconoce Federico.
¿La clave? Seleccionar a los inversores adecuados. “Goldman Sachs nos dijo: ‘Invertimos en ustedes por la cultura del equipo, no por la idea’. Esa fue la mejor validación”, cuenta Vega.
Ambos unicornios latinoamericanos coinciden en que levantar capital debe ser una decisión estratégica, no una medalla. Lo importante es usarlo para construir con libertad y sin distracciones.
El mayor desafío no fue la tecnología, ni el modelo de negocio, reconocen los dos fundadores. Fue el capital humano. “Gestionar personas es lo más difícil. Al principio éramos cinco en una sala. Hoy somos 1200”, dice el CEO de Tiendanube. El cambio de escala implica estructura, claridad y liderazgo constante.
En Frete.com, Federico dice que entrevista personalmente a cada nuevo colaborador y mantiene reuniones 1:1 con todos los líderes: “Paso la mayor parte de mi tiempo en personas”.
Su estrategia para escalar talento es clara: priorizar a los que tienen hambre, no necesariamente los currículums perfectos. “Cuando levantás capital, no es para contratar MBAs de Harvard. Es para invertir en la gente que ya te ayudó a llegar hasta acá. Hay que entrenarlos, promoverlos y pagarles mejor que el mercado”, afirma el creador de Frete.com.
El crecimiento sostenido empieza por cuidar a las personas que lo hacen posible. Eso requiere cultura, no solo recursos, coinciden los unicornios .
El crecimiento meteórico tiene un costo si no se gestiona bien: el desgaste. “Hay presión constante. Si levantaste capital, los inversores te exigen más. No puedes apagar el celular ni tomarte una semana libre. Pero si no lo manejás, te quemás”, dice Federico. Él se apoya en el deporte, la rutina y una red de fundadores que comparten el peso emocional: “Nos juntamos a llorar juntos. No estás solo”.
Alejandro reconoce. “La ambición es grande. Pero hay que aprender a lidiar con eso. Como uno hace ejercicio físico, también hay que cuidar la mente”. El equilibrio es clave: no hay éxito si el líder no puede sostenerse.
Ambos coinciden en algo esencial: construir una empresa es un camino largo. La resiliencia no se improvisa. Se entrena.