Los científicos dedican toda su vida a estudiar una sola cosa de la naturaleza. Por ejemplo, el aguacate y todos sus beneficios, o la planta de cáñamo o el desarrollo de las ranas en el caso del biólogo Douglas Melton, que abandonó sus investigaciones cuando su hijo Sam de seis meses fue diagnosticado con diabetes. Hoy busca una cura para esta enfermedad.
La solución actual contra la diabetes es el medicamento hecho con insulina. La insulina que está en el cuerpo es producida en el páncreas y regula la cantidad de glucosa (azúcar) en la sangre. Cuando el páncreas ya no puede generar insulina, el diagnóstico es diabetes. El 10.3% de la población en México es diabética; y 13% de las defunciones en el país son por la misma enfermedad, según el Inegi.
La historia de la insulina se remota a 1921, hace 103 años cuando el médico Frederick Grant Banting y su asistente Charles Best descubrieron la insulina del páncreas de un perro. Con la insulina de animales salvaron la vida de personas diabéticas. Mucho tiempo se usó la insulina del ganado y los cerdos, pero causaba alergias en muchos pacientes.
Frederick Grant Banting y Charles Best, investigadores de la Universidad de Toronto vendieron la patente por un dólar. No quisieron beneficiarse de su descubrimiento. Su deseo eran salvar vidas. Hoy el precio de la insulina sigue en aumento. Porque son pocas las farmacéuticas que la fabrican.
La farmacéutica Eli Lilly produjo la primera preparación de insulina en los años 20. Era extraída del páncreas de bovinos y porcinos. La comercializaban con el nombre de Iletin para el tratamiento de la diabetes, enfermedad mortal en ese entonces. En 2021 se cumplieron 100 años del descubrimiento de la insulina, el primer tratamiento para la diabetes.
Eli Lilly fue la primera farmacéutica en comercializar la insulina en 1923. Esta empresa fue fundada por el militar y farmacéutico Eli Lilly en 1876. Más de 140 años y casi 100 medicamentos. Entre ellos: la industrialización y fabricación de la penicilina; la producción de la primera vacuna contra la poliomielitis; así como la comercialización del antidepresivo Prozac que después vendió su patente a Pfizer.
En 2022 Eli Lilly se derrumbó en la bolsa en Wall Street por una “bromita” en Twitter. Un usuario con una “cuenta verificada” se hizo pasar por la farmacéutica y anunció que la insulina pasaba a ser gratis para todo el mundo. El mensaje corrió como la pólvora y la compañía perdió más de 15 mil millones de dólares.
El gigante farmacéutico escribió: “Pedimos disculpas a quienes recibieron un mensaje engañoso de una cuenta falsa de Lilly”. En Estados Unidos más de 30 millones de personas de todas las edades (el 11.3% de la población) padecen diabetes. EE.UU. es el país donde sale más cara la enfermedad. Unos mil dólares mensuales para aquellos que no cuentan con un seguro privado.
Seamos claros. Eli Lilly debería disculparse por aumentar el precio de la insulina en más de 1200% desde 1996 hasta los 275 dólares actuales. Producirla cuesta menos de 10 dólares. Los inventores de la insulina vendieron la patente en 1923 por 1 dólar para salvar vidas. No para hacer al CEO de Eli Lilly obscenamente rico.
La respuesta de Bernie Sanders, senador demócrata.
Eli Lilly dijo que bajaría el precio de la insulina en un 70% para “hacer más asequible el medicamento”. Hoy las acciones de Eli Lilly a pesar de la polémica van para arriba debido a nuevas aprobaciones clave para medicamentos contra el Alzheimer, la colitis ulcerosa y el cáncer. Además, hay un positivo impacto en acciones de Eli Lilly por sus sólidos resultados financieros.
