Ahora tendrás que cuidar aún más tus ‘topers’ (y los de tu mamá). Tupperware, la icónica compañía de envases de plástico, podría caer en quiebra a menos que consiga capital para pagar sus deudas y mantenerse a flote.
El pasado 7 de abril, la compañía reveló que existen “dudas sustanciales” sobre su capacidad para mantener en marcha su negocio. Ante ello, aseguraron que están buscando nuevas fuentes de financiación de forma urgente. También analizan recurrir a despidos masivos y a la venta de algunos activos para tratar de equilibrar sus cuentas.
“La compañía está haciendo todo lo que está en sus manos para mitigar los impactos de los acontecimientos recientes, y estamos tomando medidas inmediatas para buscar financiación adicional y hacer frente a nuestra posición financiera”, afirmó Miguel Fernández , CEO de Tupperware, en declaraciones recogidas por el medio 20 Minutos.
La amenaza de bancarrota estaría relacionada con que los reguladores de Estados Unidos advirtieron que podrían excluir las acciones de Tupperware de Wall Street.
La empresa presentó una declaración errónea de ganancias antes la Comisión de Bolsa y Valores, por lo que ahora están retrasados y no han presentado su informe anual. Esto podría hacer que los acreedores declaren que Tupperware ha violado sus convenios de deuda.
Tras el informe, este lunes las acciones de Tupperware en la Bolsa de Nueva York registraron una caída de hasta 49.1%, según datos de Nasdaq.
Entre el martes y este miércoles, las participaciones del fabricante de contenedores tuvieron un ligero repunte de 11.8%.
Sin embargo, la compañía prevé actualmente que no podrá tener la liquidez necesaria en el corto plazo. Entre las causas citan desafíos económicos internos y externos, así como mayores costos en los préstamos que adeuda.
