La inteligencia artificial (IA) no para, se está colando en todos los sectores e industrias. Desde el boom de ChatGPT y su evolución, el nuevo GPT-4, varias marcas han experimentado con los usos que se le pueden dar. Ahora, la firma de fast fashion Stradivarius experimentó con esta tecnología y obtuvo un resultado de ensueño: la primera colección de ropa y su respectiva campaña publicitaria creadas con IA.
“La inteligencia artificial es una tecnología capaz de crear imágenes que nunca existieron”, se puede leer en la página de la firma propiedad de Inditex. Nada más cierto. Podemos ver infinidad de ejemplos como las ‘dinoprofesiones‘ que se volvieron tendencia en redes sociales, o los avatares de Lensa que se tornaron virales.
Sin embargo, este caso es distinto, dado que se trata de una campaña comercial y un producto tangible. ¿Un hito en la historia de la moda? Sí, pero que genera muchas dudas.
“Cuando la moda y la estética no tienen límites”, dice el slogan de la campaña de Stradivarius, creada con inteligencia artificial.
“Con la primavera a la vuelta de la esquina hemos querido reinventar nuestra colección de abril con el filtro de la inteligencia artificial”, explica la marca. “Imaginamos mundos oníricos con prendas que desembocan en paisajes imaginarios, que son una explosión de colores, de flores y de tejidos envolventes”.
Esto quiere decir que estas realmente no son las prendas que se verán en el aparador u online. Simplemente son reinterpretaciones de las reales. Incluso explican que ni las modelos que portan las prendas, ni la ropa existen “aunque nos gustaría que algún día lo hicieran”.
“Son una exageración de nuestra colección real; son lo que sería nuestra moda si la realidad no nos limitara. Hemos reinventado nuestra colección como nunca antes”, finaliza el mensaje de la firma.
Stradivarius crea la primera colección y campaña por medio de una IA, pero deja muchas preguntas en el aire. Para empezar, aunque las nuevas generaciones ya están viviendo en un mundo virtual y fuera de lo análogo, exaltar la idea de belleza irreal, podría llegar a ser aún más problemático que los filtros. Por lo tanto, distorsionar exageradamente la ‘belleza real’ no sabemos qué consecuencias pueda tener en un futuro.
Por otro lado, actualmente ya hay un miedo creciente sobre si la inteligencia artificial podría dejar obsoletos algunos empleos y tomar puestos de trabajo de los humanos. Ya ocurrió el primer caso: una empresa reemplazó a su CEO por una IA. Y se espera que esto siga a la alza.
Como sabemos la IA puede crear imágenes fuera de este mundo y, si eso se vuelve el canon, ¿qué pasará con los empleos en el sector? En este caso hablamos de diseñadores, fotógrafos, estilistas y demás personas encargadas de la creatividad de una marca o compaña.
Tampoco debemos olvidar un tema de vital relevancia: los derechos de autor. Las imágenes generadas por inteligencia artificial se crean a partir de fragmentos de otras que ya existen. Es decir, los autores de las piezas originales pueden decir que el arte IA infringe sus derechos de autor al utilizar material registrado para construir nuevas imágenes.
Por último, como estrategia de marketing, exagerar el lanzamiento logra romper las barreras y crear un mundo imaginario, tal como menciona Stradivarius. Pero, si lo que aparece no es real, ¿qué le están ofreciendo realmente a los consumidores? ¿Solo son nubes en el aire o una innovadora campaña?
