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La vida es un lápiz, algunas lecciones prácticas para el crecimiento profesional

Diciembre, un momento que invita a la reflexión sobre el crecimiento profesional. Es el tiempo de hacer un balance de nuestras acciones.

¿Qué tiene que ver un lápiz con tu crecimiento profesional?
¿Qué tiene que ver un lápiz con tu crecimiento profesional? © Depositphotos.com

Llegamos al último mes del año, cuando muchos reflexionamos sobre aciertos, errores y el impacto de nuestras acciones en nuestro entorno. Me gustan mucho las metáforas, por lo que acudo a una de mis favoritas para compartirte algunas lecciones que considero valiosas y que son aplicables al crecimiento profesional: cómo mejorar, cómo corregir y cómo dejar huellas significativas en los demás.

El lápiz, un objeto aparentemente común, que encierra valiosas lecciones sobre el crecimiento personal y profesional.

Dibujar tu crecimiento profesional

Un lápiz nos enseña que siempre podemos mejorar nuestro desempeño, corregir errores, salir de nuestra zona de confort y colaborar con otros para escribir historias memorables.

Para saber más: 20 tips para impulsar tu crecimiento profesional en 2025

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En este artículo, exploraremos cómo esta metáfora puede ayudarnos a encontrar nuevas perspectivas para nuestro desarrollo profesional. Hablaremos de cómo aprovechar los errores como oportunidades de aprendizaje, la importancia de desafiarnos constantemente, el poder del trabajo en equipo y mucho más.

Al final, mi invitación es clara: que reflexiones sobre qué trazos quieres dejar en tu vida y tu carrera en el próximo año.

¿Listo para afilar tu lápiz y empezar a escribir tu mejor historia?

Un lápiz con goma: para borrar y corregir

La goma de un lápiz simboliza la oportunidad de borrar y reescribir. En el ámbito personal, sabemos que los errores llegarán, ya sea por ignorancia, incapacidad o alguna simple distracción.

En el mundo profesional esto se traduce en fomentar una cultura que enfrenta el error con apertura y que promueve el aprendizaje continuo, donde las equivocaciones no son castigadas en cuanto tales, sino entendidas como oportunidades para corregir (a las personas y a las acciones) para mejorar procesos y obtener mejores resultados.

Por ejemplo, cuando se evalúa una campaña de marketing que no logró los objetivos esperados hay, de entrada, dos posibilidades:

  1. Iniciar la cacería de brujas y solo buscar a las personas culpables.
  2. Esforzarse por entender qué es lo que salió mal y buscar, en equipo, la manera de corregirlo. Este enfoque no solo refuerza el trabajo en equipo, sino que fomenta una mentalidad de crecimiento.

Esta segunda opción, basada en el aprendizaje, no solo genera mejores resultados, sino que fortalece la cohesión y la confianza dentro del equipo.

Un lápiz que necesita ser afilado: salir de la zona de confort

Un lápiz sin punta no sirve para lo que fue creado; y al sacarle punta a un lápiz lo sometemos a fuerzas externas que le hacen, de alguna manera, algo de daño.

De igual manera, las personas no podemos alcanzar nuestro potencial si no nos desafiamos a mejorar. Afilarnos implica aceptar retos, hacer algunos sacrificios, adquirir nuevas habilidades y enfrentarnos a lo desconocido; y esto será incómodo.

Esta perspectiva es importante al diseñar la propia carrera profesional. Por ejemplo, si todavía no dominas el arte de hablar en público, acepta que el proceso para desarrollar esa habilidad implicará cierto fastidio.

Una manera de avanzar en esta dirección puede ser asumir el liderazgo en reuniones clave, o inscribirse en un curso de oratoria.

Si lideras un equipo, genera dinámicas que saquen a los colaboradores de su rutina, como asignar roles de liderazgo temporales para proyectos específicos. Este tipo de actividades no solo desarrollan habilidades, sino que también fortalecen la resiliencia y la confianza en las demás personas.

Afilarse duele, pero es el único camino hacia el crecimiento profesional. Al igual que un lápiz, cuanto más nos afilamos, más claros y precisos serán nuestros trazos.

La goma de un lápiz simboliza la oportunidad de borrar y reescribir | Imagen: Depositphotos.com
La goma de un lápiz simboliza la oportunidad de borrar y reescribir | Imagen: Depositphotos.com

Un lápiz que no puede borrar lo que no ha escrito: la importancia de intentar

La goma solo puede corregir los trazos ya hechos. De la misma manera, no podemos mejorar o aprender de aquello que no hemos intentado. El miedo al fracaso es una de las autolimitaciones más comunes en el mundo profesional y si bien la cautela y la correcta planeación son importantes, lo que no podemos permitir es que el miedo nos paralice. La vida requiere acción para evolucionar.

Lo importante es intentar, aprender y adaptarse rápidamente. Corporativamente esto se traduce en fomentar una cultura que acepte el error. Por ejemplo, si una estrategia de ventas no funciona, analiza los resultados y ajusta el enfoque. Lo importante no es cuántas veces fallas, sino cuántas veces aprendes y ajustas el rumbo.

Roberto Martínez lo explica muy bien en su podcast al sintetizar lo que ha aprendido entrevistando a cientos de personas en su exitoso programa: equivócate diferente, equivócate barato y equivócate lo antes posible; en el fondo, enfócate en disfrutar el proceso.

Un lápiz que necesita ser sostenido para cumplir su propósito: el valor del trabajo en equipo

Un lápiz por sí solo no puede escribir; necesita una mano que lo sostenga, lo guíe y ejecute. Los seres humanos no somos viables en solitario, dependemos del apoyo mutuo para alcanzar metas más allá de la mera supervivencia.

Por este motivo uno de los roles más importantes quien lidera equipos es hacer posible la colaboración entre todos. Hay estrategias fundamentales para lograrlo, como la correcta definición de roles o la comunicación efectiva, pero en definitiva la clave está en conectar con la persona que es colaborador en el trabajo.

Cultiva esas conexiones, apoya a los demás en sus trazos y la historia se escribirá a sí misma. Cuando nos apoyamos unos a otros, transformamos trazos individuales en una historia colectiva llena de significado.

Conoce más: Guía esencial para el crecimiento profesional: 10 pasos para alcanzar tus metas laborales

Una premisa fundamental: escribe tu historia profesional con intención

La metáfora del lápiz nos ayuda a reflexionar sobre nuestra vida laboral y cómo nos gustaría orientarla durante el próximo año; también nos recuerda que cada trazo importa. Si elegimos actuar con intención, podemos construir una carrera profesional que no solo deje huella, sino que inspire y transforme a quienes nos rodean.

Cada trazo cuenta, y en tus manos está escribir una historia profesional que inspire, construya y transforme.

¿Cómo serán tus trazos durante el próximo año?

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autor Gustavo Echevarría es experto en desarrollo de talento y cultura organizacional. Actualmente, lidera iniciativas de bienestar y desarrollo profesional en el sector fintech, promoviendo el florecimiento humano.