



Con el auge del trabajo digital tras la pandemia por el Coronavirus, las expectativas laborales 24 horas al día, 7 días a la semana, están afectando gravemente la salud de los trabajadores, haciendo añicos la salud mental y en consecuencia, la física. Lo que al inicio parecía una ventaja de la tecnología para estar comunicados desde cualquier lugar, se convirtió en la habitualidad e incomodidad de llevarse el trabajo a casa. Por eso, la importancia del equilibrio en toda la extensión de la palabra.
Diversos estudios han demostrado que la idea de estar conectados siempre no solo altera el equilibrio y el desempeño personal, sino que también contribuye significativamente al agotamiento emocional y al estrés en el equipo de trabajo. Esta situación no sólo se debe al tiempo que los empleados dedican a contestar mensajes fuera del horario laboral, sino también a la presión psicológica que supone una atención constante para no estar completamente desconectado del trabajo.
Para la Organización Internacional del Trabajo (OIT) aunque es cierto que el teletrabajo y/o el home office pueden reducir los riesgos por accidentes camino al lugar de trabajo, “esta modalidad puede ir aparejada de nuevos riesgos laborales, tanto físicos como mentales. Entre los factores que pueden afectar negativamente la salud mental de los trabajadores se encuentran las extensas jornadas laborales, la necesidad o percepción de estar disponible en todo momento y las altas cargas de trabajo”, sentencia la organización.
Según los expertos en salud laboral, esta situación conduce a un estrés crónico, que no sólo afecta la calidad del trabajo, sino que también afecta la salud física y mental de los trabajadores. El burnout, o el síndrome del trabajador quemado, es una condición marcada por la fatiga extrema, y las pocas oportunidades de desconectarse.
Sin embargo, en México, desde octubre del 2021, la legislación marca que los trabajadores, fuera del horario de oficina, no tienen la responsabilidad de contestar comunicaciones, lo cual contempla los correos electrónicos, llamadas telefónicas o mensajes. Hablamos del derecho a la desconexión digital, estipulado en el artículo 68 bis de la Ley Federal del Trabajo (LFT), idea que más tarde respaldo el artículo 330-E al establecer la necesidad de “respetar el derecho a la desconexión de las personas trabajadoras en la modalidad de teletrabajo al término de la jornada laboral”.
La calidad del descanso de los trabajadores tiene un impacto directo en su capacidad para concentrarse, ser creativo y tomar decisiones: tres elementos clave para ser emprendedor o líder empresarial.
Para evitar los efectos negativos que la situación de estar conectado siempre provoca, es necesario que líderes y empresarios aprovechen la oportunidad para favorecer el equilibrio entre la vida personal y profesional de las y los empleados.
Algunas estrategias incluyen:
La dinámica de estar disponible siempre, intensificada por el home office, tiene un impacto significativo en la salud mental de los empleados, provocando estrés crónico, agotamiento y reducción de la productividad. Para los emprendedores, es importante crear un ambiente de trabajo saludable, no sólo para el bienestar de las personas (que es la prioridad), sino para el éxito sostenible del negocio.