



¿La adicción a los videojuegos es una enfermedad mental real? Desde febrero de 2022 la Organización Mundial de la Salud (OMS) considera que sí.
La máxima autoridad sanitaria mundial publicó este mes su lista actualizada sobre enfermedades mentales en la famosa Clasificación Internacional de Enfermedades de la OMS (ICD-11). Esta nueva versión de la guía, que ayuda uniformar los padecimientos para guiar a los médicos, incluyó por primera vez a la adicción a los videojuegos como un trastorno mental.
El ICD-11 codificó 1.6 millones de casos clínicos de este tipo en la primera revisión y actualización de esta lista en 30 años. Hasta ahora se habían estado estudiando y codificando los casos en la psicología y psiquiatría moderna, coincidiendo con el boom de esta rama del entretenimiento.
De acuerdo con la OMS, la adicción a los videojuegos es más prevalente en los países asiáticos.
Entre los síntomas de esta adicción destacan:
“Para que se diagnostique el trastorno del juego, el patrón de comportamiento debe ser lo suficientemente grave como para provocar un deterioro significativo en el funcionamiento personal, familiar, social, educativo, ocupacional u otras áreas importantes del funcionamiento y normalmente habría sido evidente durante al menos 12 meses”, menciona la OMS.
La OMS señala que el trastorno del juego afecta solo a una pequeña proporción de personas que participan en actividades de videojuegos o digitales. Sin embargo, recomienda estar alerta a la cantidad de tiempo que pasas jugando, particularmente si excluyes otras actividades diarias o notas cualquier cambio en tu salud física o psicológica.