Las ganancias de su empresa fueron puestas en entredicho tras la venta de más de la mitad de sus acciones a un conglomerado de gran poder en el sector.
Ella y sus hermanas mayores son un ícono de belleza y estilo para las masas y nunca han estado alejadas del éxito o el dinero. Sin embargo, en el 2015, Kylie Jenner, la menor del clan Kardashian- Jenner, decidió brillar con luz propia en los negocios. Lanzó su propia línea de cosméticos y maquillaje llamada Kylie Cosmetics.
Su marca despuntó rápidamente. Inicialmente con una línea de labiales que se convirtió en un éxito, empujado por la influencia de Kylie en las redes sociales. Incluso se generó un reto viral, el Lip Challenge, en el que los jóvenes introducían sus labios en una botella o en una tapa de plástico para que se hincharan. Después los pintaban con alguno de los labiales de la magnate del maquillaje.
Con la buena racha de Kylie Cosmetics, en 2019 la revista Forbes colocó a esta mujer, de entonces 22 años, en la portada de su edición especial de “Billonarias de Estados Unidos”. Ahí, la también influencer se erigía como una de las jóvenes que más amasaron fortuna por méritos propios.
La revista manifestó que la chica había conseguido esas ganancias gracias a su exitosa empresa de cosméticos y su empresa de cremas Kylie Skin.
Kylie Jenner y la venta de sus cosméticos
Con el empuje de su marca, para noviembre del pandémico 2020, la también estrella de reality show vendió más de la mitad de su empresa de cosméticos (51%). La gran ganadora fue la poderosa multinacional de origen estadounidense, Coty. La empresa le dio a la más pequeña del clan Kardashian la enorme cantidad de 600 millones de dólares. Su interés era capturar una mayor cantidad de mercado a nivel mundial, ya que Kylie Cosmetics promueve sus artículos principalmente en el ambiente digital.
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“Estamos felices de completar esta transacción y asociarnos con Kylie Jenner para crear una marca de belleza digital de alto crecimiento”, declaró en un comunicado el CEO de Coty, Pierre Loubies, empresa de cosméticos y productos de belleza multinacional que fue fundada en 1904 y que maneja otras marcas como Lancaster, Cover Girl, Hugo Boss, Nautica, Max Factor, por mencionar algunas.
Con las cifras presentadas en la transacción, la revista Forbes despertó sus sospechas. Así, cuando revisaron los datos financieros del último año de Kylie Cosmetics, se dieron cuenta de que el negocio realmente había generado sólo 125 millones de dólares. Esto era menos de la mitad de los 330 millones que Jenner había declarado acumular con sus ventas.
Se destapa la bomba en el mercado
En un giro de 360°, en junio del citado año, la revista de negocios desmintió la información que había publicado sobre la socialité. Con el reportaje “Inside Kylie Jenner’s web of lies – And why she’s no longer a billionaire” se explicó que las cifras compartidas habían sido infladas.
Coty, que cotiza en bolsa, con su adquisición mostró que la firma de Jenner era mucho menos rentable. Su caso dibujó así cómo funcionan algunas estrategias de marketing para resaltar los perfiles de famosos en busca de aparentar mayor fortuna.
Renuncia del CEO de la marca de cosméticos de Kylie Jenner
Tras la publicación, Kylie respondió a través de su cuenta de Twitter: “Pensé que Forbes era una página web de prestigio… Y todo lo que veo son declaraciones inexactas y suposiciones sin verificar. Nunca pedí ningún título ni intenté mentir para llegar hasta aquí”.
El destape de esta bomba llevó al CEO de ese entonces de Kylie Cosmetics, Christoph Honnefelder a renunciar a su cargo. Sin embargo, en su momento solo dijo que se iba por motivos personales. Ante el movimiento, hecho el 2 de junio del 2020, el puesto fue tomado por Simona Cattaneo, quien trabajó como vicepresidente senior de belleza para la casa británica de moda de lujo, Burberry.
¿Responsable de la caída de Revlon?
Aunque se señaló que incluso podría haber una investigación por parte de la Comisión del Mercado de Valores (SEC) estadounidense, según el Daily Mail, esto no llevó a mayores represalias a la firma de cosméticos creada por Kylie. Para agosto del pasado 2023, la empresaria intentó recuperar su marca de cosméticos, ya que aún controla la parte creativa de la misma y no está contenta con el manejo de Coty, pero no se llegó a ningún acuerdo, según explicó Bloomberg.
De hecho, varios medios a nivel internacional han declarado que Kylie Cosmetics, en conjunto con marcas de cosméticos como la de Rihanna, fueron unos de los detonantes de la caída del gigante Revlon, que recientemente se declaró en bancarrota. Se dice que lo anterior fue debido a las deudas que acumuló al tratar de competir con las nuevas empresas de cosméticos, que vuelcan gran parte de sus esfuerzos de promoción y ventas en el ambiente digital.
Lecciones para emprendedores
El caso de la celebridad empresaria ofrece lecciones cruciales para los emprendedores sobre la importancia de la transparencia y la honestidad en los negocios. Si bien, la marca de cosméticos de Kylie sigue operando, la noticia de Forbes que la desmintió, dañó su imagen, resaltando que el marketing es una herramienta poderosa para aumentar el valor percibido de una marca, inflar cifras y manipular la verdad, que puede tener consecuencias graves.
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Los emprendedores deben asegurarse de que sus declaraciones financieras sean precisas y verídicas, y que su enfoque principal sea ofrecer productos de calidad y mantener la satisfacción del cliente. Lo anterior, ya que los consumidores se están volviendo cada vez más conscientes de la calidad y transparencia de los artículos de determinada marca que adquieren
Así, la historia de Kylie Jenner resalta que, aunque el marketing puede catapultar una marca al éxito, la integridad y la transparencia son esenciales para mantenerlo a largo plazo y evitar problemas legales y de reputación.