Los emprendedores del futuro mueven y transforman a México. Este grupo de soñadores genera el 78% de los empleos formales de nuestro país y representa el 99% de las unidades económicas. Con sus proyectos y esfuerzo, son los verdaderos agentes de cambios de nuestra sociedad al producir riqueza y un impacto positivo en cada una de sus comunidades.
Las y los emprendedores son el motor que mueve la economía de México. Por eso, es fundamental que más personas se preparen para los retos del futuro y se atrevan a emprender.
Emprender es mucho más que desarrollar una idea de negocio. Emprender es un asunto transversal que requiere estar en constante formación y capacitación. No basta con tener un buen producto o servicio, se requiere conocimiento. Conocimiento sobre finanzas, leyes, publicidad y producción, además de todo el trabajo, el esfuerzo y la disciplina que implica crear y desarrollar una empresa.
Es imprescindible que nuestros niños, niños y adolescentes tengan un sistema educativo para emprendedores. Es nuestro deber brindarles la formación y la capacitación más sólida para que logren concretar sus ideas en negocios rentables. Debemos darles la educación necesaria para que puedan aprovechar al máximo las herramientas financieras, tecnológicas y de gestión de negocios que les permitan construir compañías exitosas y trascendentes que provoquen un cambio positivo en el futuro de México.
Hoy necesitamos trabajar para que estas herramientas formen parte central de los planes de estudios de las secundarias, de las preparatorias y de las universidades para que los emprendedores del futuro tengan la mejor preparación posible para crear y desarrollar las Pymes del mañana.
La educación es la clave. Es urgente contar con educación de calidad para diseñar e implementar modelos de negocio que garanticen una creación de Pymes y empresas que se desarrollen y escalen en entornos más seguros y estructurados.
El financiamiento es una de las mayores preocupaciones al momento de emprender porque tener acceso a fuentes de financiamiento es un reto en sí mismo. Y este desafío se multiplica cuando los emprendedores carecen de los conocimientos óptimos para aprovechar al máximo las herramientas financieras para hacer crecer sus negocios.
La máxima después de la pandemia es ‘digitalizarse o morir’.
La tecnología y las herramientas digitales dejaron de ser un lujo para convertirse en una necesidad para cualquier empresa. En ese sentido, saber hacer frente al avance vertiginoso de la tecnología y la innovación es clave para el desarrollo de nuevos emprendimientos.
Los emprendedores del futuro están en todas partes, en todas las ciudades, en todas las industrias y, sobre todo, en las escuelas. La clave está en encontrarlos desde las edades más tempranas para ofrecerles una visión alternativa del mundo: emprender no es una afición, es una carrera y necesitan toda la preparación y las herramientas para tener éxito en el mundo empresarial del mañana.
