Los meses sin intereses (MSI) son una figura de pagos que se ha vuelto parte de la forma inteligente en la cual compran los mexicanos, pero que pocos conocen de dónde salió, cómo funciona y qué ventajas tiene, no solo para los clientes sino también para los comercios.
En la década de los 90, los mexicanos adoptaron los MSI, una tendencia proveniente de Argentina, pues les permitió aumentar su poder adquisitivo sin afectar sus finanzas personales inmediatas, gracias a los pagos diferidos en mensualidades.
Más de 30 años después de la implementación de este método de pago, los clientes siguen prefiriendo esta opción: alrededor de 70% de los titulares de tarjetas en México utilizan los meses sin intereses como una primera opción al pagar sus compras, principalmente de productos con una vida útil mayor al tiempo que solicitaste para pagarlo. De hecho, ocho de cada 10 personas que tienen una tarjeta aseguran que poder diferir un pago es un factor decisivo para elegir la tienda en la que compran.
Además, México ha experimentado una constante digitalización en el ámbito financiero. En el año 2000, había alrededor de 14 millones de tarjetas de crédito activas en el país. Sin embargo, para el año 2022, este número se incrementó significativamente a 30.5 millones, según datos proporcionados por la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV).
Además, durante el primer semestre de 2023, se llevaron a cabo aproximadamente 2,268 millones de pagos con tarjetas en comercios tradicionales y electrónicos, según reportes de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef).
Ante la creciente demanda del consumidor, así como la digitalización, no sólo los establecimientos físicos aceptaron esta modalidad de pago, sino que los comercios en línea lo incorporaron como una de sus estrategias de crecimiento.
MSI no solo permite a los negocios incrementar su volumen de ventas, sino también aumentar el monto promedio de cada venta, ya que los clientes se sienten más cómodos al hacer compras más grandes cuando tienen la opción de pagar a plazos.
Ahora bien, mientras que las tiendas físicas pueden ofrecer estos pagos directamente en sus sistemas y terminales de pago, las tiendas en línea enfrentan el problema de desarrollar desde cero sus páginas de checkout para comercio electrónico.
Para obtener estos beneficios, las tiendas y comercios deben ofrecer al comprador una experiencia sencilla y sin fricciones durante el proceso de pago que le permita:
De igual manera, el comerciante debe establecer ciertos criterios que le permitan ofrecer este beneficio y mantener la continuidad de su negocio; por ejemplo, si debe o no establecer ciertos periodos de pago. Hay algunos negocios, por ejemplo, que solo ofrecen MSI en ciertas temporadas o como parte de alguna promoción especial. También es común utilizar este beneficio para premiar a los clientes y fomentar su fidelidad.
Como compradores, rara vez reflexionamos sobre la complejidad que implica desarrollar páginas de checkout en el comercio electrónico.
Estas páginas exigen una serie de reglas, matices y ofrecen diversos métodos y experiencias de pago en línea, los cuales utilizamos al realizar nuestras compras.
Codificar reglas en el back-end e implementarlas en el front-end para proveer una experiencia sin fricción es un proceso que consume valioso tiempo y recursos. Por ello, existen herramientas de low-code y no-code, como las de Stripe, con las que se puede hacer una configuración sencilla y fácil para que los usuarios acepten los MSI.
Los beneficios para los negocios son muy claros. Stripe ha recolectado datos que indican que, desde que se lanzaron estas soluciones sin código, el número de usuarios que adoptaron los MSI como modalidad de pago creció a más del doble. Los comercios quieren soluciones sencillas, y los consumidores, facilidades de compra. Así como los beneficios para los consumidores, al permitirles comprar un artículo o servicio que se necesita o se desea, aunque no tenga el importe total, sin incurrir en el costo que genera diferirlo. Es tal este beneficio que hasta algunos gobiernos implementan MSI para estimular el pago de servicios.
