Buscador
FRANQUICIAS IDEAS DE NEGOCIO GUÍA DEL EMPRENDEDOR
Ver revista digital

¿Cómo cobrar exitosamente y cerrar una venta?

La venta no termina hasta que se cobra. Toma nota de dos soluciones efectivas para asegurar la cobranza y generar verdaderas ventas en tu negocio.

© Depositphotos.com

La venta termina hasta que logras cobrar exitosamente. De esta manera, se generan los ingresos que tu empresa requiere para operar. Sin embargo, no dejes esta labor hasta el final, sino más bien hazla parte de todo el proceso.

¿Cómo cobrar exitosamente?

Las soluciones efectivas para asegurar la cobranza de lo que vendas se dividen en dos:

1. Antes de cerrar

El cierre es la cúspide de la venta, pero no termina ahí. Antes de darse la mano en señal de acuerdo, verifica que la otra persona cumpla con tu perfil de cliente. De lo contrario, lo más seguro es que se convierta en una cuenta por cobrar. El problema es que con tal de llegar a su cuota, algunos vendedores se olvidan de este punto cuando es básico asegurarse de que el prospecto disponga del dinero suficiente para pagar.

También debes dejar en claro las condiciones de pago. La recomendación es pedir un anticipo del 50% y el resto una vez hecha la entrega de la mercancía o completado el servicio. Ojo: valida esta parte con el comprador y ponlo todo por escrito en un contrato. Si algo no queda claro, explícalo hasta que se entienda.

La finalidad de intimar con el prospecto durante el proceso de venta es conocerlo a fondo para saber con qué tipo de persona harás negocios. De esta manera, desde el principio sabrás si se trata de alguien en quien puedes confiar y que, al igual que tú, cumplirá su palabra.

Entre más conozcas a tu contraparte, aumenta la probabilidad de que te pague en tiempo y forma; porque finalmente te ve como un socio estratégico y no como un proveedor más. Esta persona se dará cuenta de que en el fondo, tu intención es ayudarlo, asesorarlo y no estrictamente venderle algo.

2. Después de cerrar

La clave aquí está en dejar entregas pendientes hasta que se realicen los pagos correspondientes. Claro que esto debe ir acorde a lo establecido en el contrato firmado. Otra opción es que te firmen un pagaré o te den un cheque. Si bien no es dinero en efectivo, con estos documentos se genera un compromiso de pago.

Para que el proceso no quede incompleto, ve más allá y analiza el potencial de negocios que puedes alcanzar con cada cliente a largo plazo. Esto significa hacer tratos con personas con posibilidades de comprarte una y otra vez.

Para tener en cuenta

Rigoberto Acosta, master coach de Action Coach, aconseja contar con un sistema para que la cobranza no se convierta en un proceso desagradable, sino que sea parte del profesionalismo de tu empresa.

Pero, ¿por qué hay gente que no quiere pagar? El experto opina que aquí entra en juego una situación de percepción, debido a que no posicionaste correctamente tu negocio frente a los ojos del cliente.

“Si las reglas para cobrar están claras para ambas partes, ¿cuál es el problema? Pero atención: esto es una resultante de haber hecho bien todos los pasos que integran el proceso de ventas”, finaliza.

cobranza