En esta ola de calor, recuerda que el cuerpo está diseñado para trabajar con temperaturas alrededor de los 37 grados, lo mismo sucede con el cerebro.
Desde hace algunos días se vive en toda la República Mexicana una intensa ola de calor por lo que varias ciudades han alcanzado temperaturas de hasta 40 grados. Estas altas temperaturas pueden generar lo que se llama estrés térmico y si no hay prevención en el trabajo pueden llevar a consideraciones muy graves.
El estrés térmico es un estado de malestar, incomodidad o molestia que se produce cuando existe una acumulación o pérdida excesiva de calor, que puede provocar un bajo rendimiento laboral y puede traer condiciones graves para el empleado.
Hay que recordar que el cuerpo está diseñado para trabajar con temperaturas alrededor de los 37 grados, lo mismo sucede con el cerebro. Más allá de ello, comienza a haber cansancio y en el cerebro se desarrollan una serie de reacciones químicas que se relacionan con un mal estado de ánimo en general, como irritabilidad, agresividad, apatía e impulsividad.
Cuando el organismo está a temperaturas más altas, el cerebro manda la señal al cuerpo para que trabaje menos, y busca restablecer la temperatura normal, ello provoca espasmos musculares, agotamiento y golpes de calor.
Con todo esto en cuenta, es algo normal que la productividad se vea disminuida, sobre todo en trabajadores que tienen que estar en la intemperie, o bien desarrollan su actividad fuera de la oficina, haciendo traslados importantes.
Síntomas de un cuerpo afectado por el estrés térmico
Algunos síntomas que experimenta el cuerpo ante un intenso calor son:
- Deshidratación (sed intensa)
- Boca seca
- Calambres
- Mareos
- Desmayos
- Agotamiento
- Debilidad muscular
- Dolor de cabeza
- Sudoración excesiva
- Náuseas y vómito
Para evitar el estrés térmico es necesaria la prevención en el trabajo. Comienza con evaluar el área laboral y las condiciones en las que tus empleados realizan sus tareas, evitando: trabajos extenuantes bajo el rayo del sol, un ambiente cerrado y sin ventilación dentro de la oficina o negocio, no contar con una fuente de hidratación cercana, vestimenta gruesa o excesiva, por mencionar algunos.
¿Cómo evitar el estrés térmico?
Entre las medidas que puedes poner en marcha para evitar el estrés térmico y que tus empleados sufran los estragos de la ola de calor que se está experimentando están:
- Verificar que los aparatos de climatización funcionen adecuadamente, en su defecto si careces de ellos vendrá bien la adquisición de ventiladores que refresquen el área de trabajo.
- El uso de vestimenta ligera y colores claros.
- El uso de gorra, bloqueador solar y lentes con filtro UV para empleados que tengan que trabajar a la intemperie.
- Evitar tareas extenuantes alrededor del medio día, por ejemplo si es necesario descargar material es mejor hacerlo por la mañana, muy temprano o después de las 5 de la tarde.
- Evitar trabajos extremos y actividad intensa, limitando el esfuerzo físico.
- Si es necesario realizar actividades durante las horas de más calor programar descansos, rotaciones y trabajo solidario.
- Contar con fuentes de hidratación para el consumo del personal, bebidas con sales y azúcares e isotónicas.
- Evitar la sobreexposición al calor.
- Poner en funcionamiento una campaña de información sobre los riegos de una exposición prolongada al sol.
Toma en cuenta que si el área de trabajo, negocio u oficina no son confortables, corres el riesgo de que tus empleados sufran de estrés térmico, pero además de que tus clientes no acudan a ti, generando así no solo una disminución de productividad sino una baja importante en tus ventas.