



MÉRIDA. Las mujeres somos el 50% de la población, sin embargo, generamos sólo 37% del PIB mundial, recibimos un pago diferente al de los hombres y no ocupamos suficientes posiciones de liderazgo. Durante los últimos 10 años, más mujeres se han incorporado al mercado laboral (70 millones de mujeres), cada vez escuchamos de más emprendedoras e incluso de inversionistas, pero todavía tenemos un largo camino por recorrer.
Hablar de alcanzar la equidad de género no es solamente un tema moral. Se trata de un tema económico a través del que se puede revertir y bajar los niveles de pobreza . Para muestra, algunas cifras que resaltan el impacto que podemos alcanzar de invertir en la equidad. Datos de Mckinsey señalan que, de acortarse la brecha de género, las mujeres lograríamos aportar un PIB de 28,000 millones de dólares, es decir, un 26% de la economía mundial y en América Latina alcanzar un incremento del PIB del 34%.
Imagen: Marisol García Fuentes
Para hablar de este tema, de buenas prácticas y co-crear soluciones innovadoras para impulsar la inversión con enfoque de género, también conocida como inversión inteligente con lente de género, Pro Mujer organizó la primera edición del Gender Lens Investing Forum Latin America ( GLI Forum Latam ), del que Entrepreneur fue media partner.
El evento reunió emprendedores, inversionistas, ONGs y actores claves del ecosistema de impacto en la Hacienda Tekik de Regil, en Mérida, Yucatán. La jornada se celebró en el marco del Foro Latinoamericano de Inversión de Impacto (FLII).
Carmen Correa, directora de Operaciones de Pro Mujer , una organización de desarrollo sin fines de lucro que brinda programas de inclusión financiera, salud y educación a mujeres de bajos recursos en América Latina, advirtió: “Estamos en un momento crítico y punto de inflexión para que los fondos y emprendedores tomen mayor interés en incorporar estos conceptos”.
La directiva señaló que de acuerdo con el International Finance Corporation (IFC) a las emprendedoras les está costando acceder al financiamiento, una de las principales causas del fracaso de los emprendimientos. Añadió que existe una brecha de 5,000 millones de dólares en financiamiento para las microempresas, y de 93,000 millones de dólares para las pequeñas y medianas empresas lideradas por mujeres.
De 78 fondos de inversión de impacto, el 35% no han invertido en emprendimientos liderados por mujeres, sólo el 30% reporta haberlo hecho y solamente en un 10% de sus inversiones.
“Aunque las microfinancieras han avanzado, todavía hay mucho por hacer, deben redefinirse: mejorar procesos y tecnologías que permitan atender las necesidades de la mujer de hoy”, dijo Correa.
Imagen: Marisol García Fuentes
La inversión con mirada de género está atrayendo tanto a inversionistas de impacto, como a inversionistas tradicionales. Los siguientes son los principales lentes con los que se puede ver el uso del capital para generar simultáneamente retornos financieros y avanzar en la igualdad de género al integrar un análisis de género al análisis financiero.
El lente puede variar y ajustarse según la necesidad del fondo o los inversionistas. Correa destaca: “No se trata de invertir con un enfoque de género por ser lo correcto, sino porque es lo más inteligente”.