Durante más de 50 años el monte Cervino (Matterhorn), ha sido parte de la identidad de Toblerone, pero ya no será así. La compañía se verá obligada a cambiar su logo y quitarle la imagen del monte más famoso de Suiza. Así es, una de las firmas chocolateras más famosas del mundo se enfrenta a la pesadilla de muchas empresas: un rebranding.
La marca fue fundada en 1899 por Jean Tobler en la capital suiza, Berna. Pero se ofrecieron los icónicos chocolates en forma de triángulos en 1908, estos representan el monte Cervino. Ahora la compañía, Toblerone ya no podrá mostrarlo porque los chocolates no serán 100% suizos.
La dueña de la compañía, Mondelez ha decidido trasladar parte de la producción a Eslovaquia. Según las normas suizas, esto choca porque no está permitido utilizar símbolos nacionales para promocionar productos lácteos que no se fabriquen exclusivamente en el país helvético. Es decir, si los chocolates no se hacen en el territorio, no pueden mostrar el famoso monte, básicamente.
La medida obligará a Toblerone a modificar su empaquetado. Por lo tanto, tendrá que sustituir en nevado alpino por un monte más genérico, de acuerdo con informes.
Según la BBC, el nuevo empaque tendrá “una tipografía y un logotipo nuevos, además de distintivos que se inspiran en la historia de Toblerone, la firma de nuestro fundador, Tobler”. Además, aunque se ha comercializado el chocolate hecho con leche suiza, miel y turrón de almendras desde hace 115 años, fue hasta los 70 cuando incorporaron la silueta del monte suizo.
La empresa matriz del chocolate, Mondelez, explicó que traslada la producción para responder al aumento de la demanda en todo el mundo y hacer crecer la marca para un futuro.
Cabe recordar que Modelez también es dueña de la empresa mexicana Ricolino, luego de que Grupo Bimbo la vendió por 27,000 millones de pesos mexicanos en abril de 2022. La transacción se concretó en noviembre del mismo año y desde entonces marcas icónicas como Paleta Payaso, Panditas, Duvalín, Bubulubu, Dulces Vero, Cajeta Coronado y Chocolates La Corona, entre otras, ahora son propiedad del corporativo multinacional.
