La “mujer Nagel” es una versión idealizada de la mujer posmoderna con la que el artista saltó a la fama, al grado que hizo la portada de un álbum de la banda Duran Duran.
A pesar de tener una corta vida, Patrick Nagel dejó un legado que ha perdurado por varios años gracias a su particular interpretación de la mujer. En la actualidad, aún es posible ver su arte en entornos donde el glamour y el estilo se entrelazan, como los salones de belleza.
Patrick Nagel, el artista que reinterpretó la belleza femenina
Un 25 de noviembre de 1945, en Dayton, Ohio, nació Patrick Nagel. Un artista estadounidense que se convertiría en todo un ícono del arte y cultura pop, especialmente durante la década de los años 80.
La vida de Nagel transcurrió principalmente en Los Ángeles, California, ciudad a la que llegó durante su adolescencia. Tras servir para el ejército norteamericano en la Guerra de Vietnam, se concentró en su formación académica. En 1969 ingresó al Instituto de Arte Chouinard, y también obtuvo un título en Bellas Artes por la Universidad Estatal de California, Fullerton.
El joven comenzaría su vida profesional haciendo diseños gráficos para la ABC. Sin embargo, sería su trabajo como artista independiente lo que lo catapultaría a la fama en los siguientes años.
Ya trabajando por su propia cuenta, Nagel se especializó en corporativos y revistas, lo que le permitió trabajar con grandes empresas como Universal Studios, IBM o MGM. También pudo realizar colaboraciones para grandes publicaciones, incluidas Architectural Digest, Harper’s Magazine o Plaboy.
La “mujer Nagel” que catapultó su trayectoria
Fue su relación con la revista del magnate Hugh Hefner la que le permitió evolucionar su arte y desarrollar un estilo. Además, fue también ese espacio el que vio nacer a la “mujer Nagel”.
Influenciado por el Art Déco y los grabados japoneses, el ilustrador desarrolló una versión idealizada de la mujer posmoderna. Éste se caracterizaba por tener una piel pálida, cabello negro o labios rojos y carnosos.
Esta concepción de la belleza femenina causó revuelo durante la década de los 80 y debido a su arrolladora popularidad, fue elegido para crear la portada del álbum “Rio” de la banda pop rock británica, Duran Duran.
Los trazos estilizados, la elegancia, la atención al detalle, su asociación a la moda y tendencias de la época, contribuyeron a que, en esos años, muchos salones de belleza recurrieran a las obras de Nagel como parte de su decoración, y aunque la popularidad del artista disminuyó tras su muerte, aún en nuestros días es posible ver piezas que, aunque no fueron realizadas por él, muestran la clara influencia que dejó.
Un gran legado pese a una vida muy corta
El estilo de vida de Patrick Nagel se caracterizaba por una alimentación deficiente, un alto consumo de cigarros y malos hábitos de sueño, esto, aunado a una falla cardiaca que nunca fue detectada, terminaron con la vida del artista a sus apenas 38 años debido a un infarto.
A su muerte, algunos personajes como el director, Karl Bornstein, intentaron seguir comercializando las obras del ilustrador sin tener gran éxito, principalmente porque éstas no tenían la firma de Nagel y, por lo tanto, no se pudo comprobar su autenticidad. Para 2017, una versión japonesa de la portada del álbum “Rio” fue subastada, alcanzando un valor de $212,000 dólares.