Hace poco más de un mes, la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, STPS, puso nuevamente sobre la mesa su intención de formalizar a conductores y repartidores de las diversas plataformas tecnológicas de transporte y delivery como Didi, Uber o Rappi.
Después de que en 2021 las plataformas tecnológicas de transporte y delivery se negaran a esta formalización, ahora han anunciado que están dispuestas a aceptar este proceso siempre que se realice bajo un esquema de flexibilidad para los trabajadores, pues de no hacerse de esta forma, se perderían muchos empleos y el Estado perdería ingresos.
Esta posible transición se da enmedio de la polémica provocada por las prohibiciones a Didi y Uber para recoger pasajeros en el Aeropuerto de la Ciudad de México.
Estas intenciones de formalización de empleos en las plataformas tecnológicas se sustenta en que al primer trimestre de 2022, más de 300 mil personas activas en el RFC obtienen ingresos a través de dichas plataformas, lo que significa un crecimiento de casi el 50% con respecto al mismo lapso de 2021.
Estas empresas mencionaron para Forbes México los avances en las negociaciones con la STPS. En dichas conversaciones de menciona que, de entrada, es fundamental que las autoridades comprendan cómo funcionan estas plataformas.
En especial, es importante que las autoridades consideren que gracias al modelo económico de dichas empresas, miles de repartidores y conductores han logrado trabajar durante la contingencia sanitaria, con la posibilidad de decidir el tiempo, los horarios y las zonas en las que trabajan.
Este esquema de flexibilidad, que según las plataformas tecnológicas, les ha funcionado muy bien hasta ahora, es el que quieren que se mantenga en caso de formalizar los empleos de los socios.
Didi comentó para Forbes México que están en la mejor disposición de encontrar la forma de brindar mayor protección social y, al mismo tiempo, mantener la flexibilidad de su modelo económico, pues eso permitirá que sigan siendo una fuente de ingresos para sus conductores y repartidores.
De igual forma, Uber espera lograr un nuevo modelo en el que se equilibre lo que implica la evolución del trabajo gracias a la innovación tecnológica y un modelo laboral adecuado para sus conductores y repartidores.
Dar a cada empleado tanta libertad y, al mismo tiempo, protección como sea posible, es el punto principal que estas empresas sostienen, y que es el que debería sustentar los cambios legislativos en relación con la situación laboral de sus repartidores y conductores.
Ambas empresas resaltan este punto, pues aseguran que en otros países como España y Ginebra, donde se cambió el modelo de negocios, los resultados han impactado de forma negativa las oportunidades laborales y económicas así como las entregas de los restaurantes.
Según Uber, estos cambios en el modelo de negocios en Ginebra, generaron una reducción de hasta el 67% de las oportunidades laborales que ofrecían. Mientras que en España, pasaron de emplear 30 mil trabajadores a solo 23 mil. Esto implicó perdidas de hasta 16 millones de euros para los restaurantes, más de 1 millón de euros para los repartidores y más de 570 mil euros por conceptos de impuestos para el Estado.
Con información de Forbes México
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