



La bebida de Big Cola incursionó en el mercado nacional en el 2002 y tomó por asalto a los gigantes refresqueros Coca-Cola y Pepsi con su buena aceptación. Con un enorme envase de más de 3 litros y un precio accesible de 17 pesos -30 % menos que su competencia- conquistó el gusto de los mexicanos, el mejor público a nivel mundial en el consumo de refrescos, gracias a la alta demanda.
Detrás de Big Cola se encuentra la empresa peruana, Grupo Aje, que surgió en la década en los ‘80, en Ayacucho, una ciudad de la sierra conocida por ser la cuna de un grupo terrorista llamado Sendero Luminoso, un movimiento de pensamiento maoísta que desató una fuerte ola de violencia y caos en país andino, con importantes pérdidas humanas, y que dejó virtualmente incomunicado a varios poblados.
Ante el escenario descrito, los distribuidores de Coca Cola y Pepsi no podían llegar a abastecer con sus bebidas a varias provincias del Perú. De esta forma, seis hermanos de apellido Añaños, decidieron embotellar en su casa una bebida gaseosa parecida a la Coca Cola, pero mucho más accesible, que años después llegaría a diferentes países de América Latina y otros continentes.
Parte de su estrategia comercial se encaminaba a conquistar los sectores que no podían adquirir esos refrescos tradicionales de origen estadounidenses. Así, nació inicialmente Kola Real, marca que gracias a su crecimiento y aceptación en el Perú, se quedaría con parte de familia Añaños, los Añaños Alcazar, mientras que los Añaños Aje formaron Grupo Aje, para dar vida a Big Cola.
Es así que, inició la comercialización y distribución de Big Cola a diversos rincones del país y el mundo, iniciando por América Latina y siendo Venezuela la primera nación a la que llegaría.
Vale la pena decir que a 10 años de su arribo a tierra azteca, en 2002, Grupo Aje ya poseía 15% de participación del mercado, según lo publicado por diversos medios, así como 6 plantas productoras. Sin embargo, la empresa de origen peruano tuvo que optar por un cambio de estrategia en su comercialización y distribución debido a una batalla legal que enfrentó contra el gigante mundial: Coca Cola.
Big Cola tuvo que mirar a las grandes cadenas de retail, donde se vende una parte importante de refrescos que consume la población.Lo anterior, debido a lo que llamarían una competencia desleal por parte de la famosa marca estadounidense, la cual nunca fue aceptada en los tribunales.
Entre el 12 de mayo y el 14 de octubre del 2003 diversas personas físicas y Grupo “presentaron una denuncia ante la Comisión Federal de Competencia contra lo que denominaron “Sistema Coca Cola”, por la comisión de presuntas prácticas monopólicas relativas, en el mercado de la distribución y comercialización de bebidas carbonatadas en envase cerrado”, explica un documento del Instituto de Investigaciones Jurídicas (IIJ) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), en el que se estudia el caso paradigmático de esta marca.
Se explica que la Comisión Federal de Competencia (Cofeco) realizó el análisis del caso y encontró que efectivamente existían prácticas monopólicas, que desplazaron indebidamente el acceso de Grupo Aje en el mercado nacional de la distribución y comercialización de bebidas carbonatadas en el país.
En el estudio, elaborado por Jean Claude Tron y Alfredo Jiménes, presentados como Magistrado de circuito y el profesor en la Universidad Panamericana, en el Instituto de la Judicatura Federal y en el ITAM y Secretario de estudio y cuenta en el Cuarto Tribunal Colegiado en Materia Administrativa del Primer Circuito, respectivamente, se dan detalles del sonado caso, el cual derivó en importantes pérdidas para la marca peruana.
Así, el documento indica que Coca Cola ofertaba sus productos a tiendas detallistas con la condición de no vender ni promocionar la bebida carbonatada de Big Cola, pues de lo contrario, no vendería sus productos. Sin embargo, la demanda de David contra Goliat no procedió y Big Cola tuvo que cambiar su estrategia.
El daño se materializa al limitar la posibilidad para que el consumidor cuente con diversas opciones (precio y calidad) al momento de adquirir refrescos dentro del canal detallista, en virtud de la instrumentación y coordinación de conductas de exclusividad y ventas atadas, detalla el documento. Pese a ello, Grupo Aje perdió la demanda interpuesta contra Coca Cola y sus embotelladoras, por lo que en lugar de recibir dinero en compensación tuvo que dar una cuantiosa suma por concepto de gastos judiciales.
Actualmente, la bebida nacida en el Perú continúa con presencia en México, además de 17 países de América Latina, también se vende diversos puntos de Asia, África y Europa. Su último embajador fue el famoso cantante Luis Fonsi, conocido por su éxito mundial: “Despacito”, con quien hizo un video promocional que presenta a la marca como la preferida por los latinos.