¿Qué tipo de emprendedor eres? Tu círculo de contactos puede decírtelo.
Es bien sabido el dicho “dime con quién andas y te diré quién eres”, ¿pero qué tan cierto es? Jim Rohn, empresario, autor y orador, también tiene una cita famosa al respecto: “Eres el promedio de las 5 personas con las que más te relacionas”.
No es una verdad absoluta, pero creo que sí se acerca bastante a serlo, sobre todo si eres un emprendedor o estás en búsqueda de ello. Lo pongo de la siguiente manera: las ideas que un emprendedor pueda tener para comercializar su producto, cerrar un trato o hasta para iniciar una compañía, no nacen y se desarrollan simplemente en su mente. Son conexiones que se forman en el cerebro a través de otras ideas aisladas que él escucha o que percibe del exterior. Es decir, de las personas que están a su alrededor.
Las personas que te rodean definitivamente influyen en tu desarrollo, sea para bien o para mal. Jay Williams, quien fue basquetbolista profesional y actualmente es un emprendedor y comentarista deportivo, en una entrevista reciente brinda una forma diferente de ver esa influencia que se me hizo muy interesante y acertada.
El atleta mencionó de una manera muy original e interesante que él percibe a las personas con las que pasa la mayor parte del tiempo y las más allegadas como aquellas personas que conforman la junta directiva de su “empresa”, y a “empresa” se refiere a él mismo. ¿Qué quiere decir con esto? Que las personas que están a tu alrededor tienen el poder de marcar tu camino y tu ritmo. Pueden aconsejar qué acciones debes tomar, de hacer que te des cuenta de los errores que cometes, pero también de provocar conflictos, de generar vicios y conformismo.
Aunque tú seas el CEO de ti mismo, la “junta de directores” tiene gran influencia sobre tus acciones. Así que elige bien a los que conforman dicha junta. Jay comenta que cuando tocó fondo, su junta de directores estaba conformada por vendedores de droga, amigos que solo les gustaba andar de fiesta en fiesta, y otras personas que no eran un ejemplo a seguir. Por el contrario, cuando se levantó y alcanzó nuevamente el éxito fue debido a que se rodeó de gente mejor que él. Es decir, gente de la que aprendió a no darse por vencido y a encontrar nuevamente significado y su pasión profesional.
Y no solamente en tu vida privada te debes de rodear de la mejor gente. Hazlo también con tu equipo de trabajo elige gente que sea multidisciplinaria y talentosa. Asegúrate que se complementen y que trabajen en equipo, y sobre todo que sean mejor que tú en varios aspectos. Ellos te ayudarán a tomar las mejores decisiones y a conseguir los mejores resultados.
