El mundo que conocíamos no es el mismo y eso puede verse tanto en los pequeños detalles de la vida cotidiana como en los grandes cambios que se ven a nivel macro en diversos sectores. En ese sentido, podemos hablar de los negocios en redes sociales o las maneras novedosas de ingresar a los mercados financieros que dominan la escena en la actualidad. En nuestro smartphone, después de todo, cabe un universo.
En ese sentido, si de hablar de mercados financieros se trata, no se puede pasar por alto el boom de criptomonedas que se respira ya hace largos años en todo el mundo, con un crecimiento exponencial en la cantidad de plataformas disponibles y en el número de usuarios inscriptos.
Cabe recordar que las criptomonedas tuvieron un auge inesperado durante la pandemia de Covid-19, en donde alcanzó su máximo histórico en términos de valor y cotización. Sin embargo, en 2022 sufrió una caída dura que despertó la alarma de los pequeños y medianos inversores de todas partes.
Tras un 2023 signado por la recuperación, la confianza en el mercado parece haberse repuesto y es momento de preguntarse si conviene considerar a este activo para nuestra cartera financiera de cara al 2024. ¿Qué se debe tener en cuenta? ¿Existen distintas formas de poder ingresar a este mercado?
A la hora de hacerse con una criptomoneda, conviene saber que existen muchas formas de contar con ellas. Más allá de saber minar criptomonedas, hoy en día las plataformas de inversión han logrado acercar a estos activos financieros a millones de personas en todo el mundo.
Algo similar ocurre si se tienen en cuenta a las billeteras virtuales o a las plataformas de pago. Incluso muchos bancos tradicionales han comenzado a replantearse seriamente su postura respecto a este instrumento para poder acercarlos a sus clientes. El 2024, en esa misma línea, promete novedades más que interesantes.
por otra parte, el 2023 también ha sido conocido por muchos especialistas y analistas como el gran año de la regulación de los mercados de las criptomonedas en muchas potencias económicas. La fuerte caída del 2022, aseguran, habría acelerado los tiempos para esto suceda.
La consecuencia de ello ha sido, hasta el momento, más que positiva, ya que ha permitido a los pequeños y medianos inversores poder recuperar la confianza en el mercado, así como también conocer nuevas plataformas reguladas que brindan más seguridad. Sin dudas, nos encontramos ante un panorama expectante en el mundo de las criptomonedas.
A su vez, conviene considerar que el sector de las criptomonedas ha cambiado su ecosistema en los últimos años. Mientras que por mucho tiempo Bitcoin y, en menor medida, Ethereum dominaban la escena, lo cierto es que el campo se ha diversificado de gran manera.
Además de las denominadas “stable coins” que fijan su valor a otro activo, podemos hacer mención a las grandes protagonistas de este año que se termina: las “meme coins”. Estos activos, con poco valor en el mercado, han abierto la puerta a que los inversores puedan entran al sector sin grandes inversiones de dinero.
Por último, el 2023 termina con un rendimiento positivo en las principales divisas digitales, lo que despierta una expectativa global. Sin embargo, no es ese el motivo principal que acerca el optimismo al mundo de las criptomonedas. ¿De qué se trata?
Para la primera mitad del 2024 se encuentra proyectado el halving de Bitcoin, el cual puede dar un gran impulso al sector en general. Además, las prontas salidas de ETFs también han empujado al precio de las monedas digitales hacia arriba. ¿Será el principio de una racha alcista?
