



Si quieres lanzar un negocio, debes pensar en registrar tu marca.
En nuestro país, la cultura de protección intelectual e industrial es escasa. De acuerdo con cifras del Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI), en el 2015 los registros de patentes, diseño industrial y modelos de utilidad fueron más de 14,000, mientras que en 2019 esta cifra fue a la baja al contar con alrededor de 12,076 registros.
Hay que destacar la necesidad de patentar los inventos de los emprendedores y sus marcas, para evitar problemas posteriores como el plagio por parte de un tercero. Recuerda que tu marca es el vínculo entre tu empresa y tu consumidor. Es la que permite al mercado ubicarse entre la competencia, se convierte en un distintivo.
Es común que se confundan ambos términos, sin embargo, existe una clara diferencia entre ellos, pues únicamente se puede patentar una invención. Es decir, cuando se crea un producto nuevo con una fórmula o proceso específico, se solicita la patente ante el IMPI como una vía de reconocimiento y protección legal para su creador.
En cambio, el registro de marca es el que permite la individualización de los productos para distinguirlos de los competidores bajo un nombre comercial. Es decir, los emprendedores que iniciarán su negocio a partir de la creación de algo previamente inexistente en el mercado requerirán una patente y también su registro de marca.
Ante la pregunta sobre si primero se debe constituir la empresa y luego registrar el nombre comercial, lo primero que se debe hacer es registrar la marca para evitar que alguien más se anticipe a solicitar ese nombre. ¿Qué pasa si el emprendedor aún no constituye su empresa? Para ello, los emprendedores pueden iniciar con este trámite como personas físicas.
Se puede reconocer a dos personas físicas como las propietarias de la marca, solo es necesario su CURP y RFC. Una vez que constituyan la empresa, pueden ceder los derechos de marca a la persona moral y esto tiene un costo aproximado de 400 pesos.
Tras registrar tu marca, al cumplir los primeros tres años, es necesario realizar una declaración de uso para notificar al IMPI que continúas utilizándola, de lo contrario, automáticamente este organismo da por entendido que no está en uso y la libera para que alguien más la registre.
Una vez que definas tu idea de negocio, procura elegir su nombre comercial y de ser posible desarrolla tu logotipo al mismo tiempo, así puedes realizar tu registro de marca y logotipo con una inversión aproximada de 2,696 más IVA, aplicando un pago único por ambos conceptos. En caso de que decidas primero registrar la marca y después añadir el logo, deben considerar que deberán efectuar el pago nuevamente.
Emprendedor, si ya llevas tiempo con tu negocio y aún no has registrado tu marca, no pierdas más tiempo, inicia el trámite cuanto antes para blindar tu negocio frente a cualquier posible plagio. Y en caso de que exista un nombre similar al tuyo previamente registrado, asesórate con especialistas para conocer qué alternativas hay para ti.