Elon Musk, el controvertido empresario y fundador de Tesla y SpaceX, ha respondido a una invitación de Hamás para visitar Gaza, en medio de acusaciones de antisemitismo.
El pasado martes 28 de noviembre, Hamás, el movimiento terrorista en Palestina, envió una invitación a Elon Musk para visitar Gaza, tras su visita a una comunidad israelí afectada por ataques del grupo. Osama Hamdan, líder de Hamás, expresó en una conferencia de prensa en Líbano la esperanza de que Musk pudiera ver el “alcance de las masacres y crímenes cometidos contra nuestra gente”.
El empresario había visitado Israel el lunes 27 de noviembre, donde se reunió con funcionarios, incluido el primer ministro Benjamin Netanyahu. Durante su estancia, expresó una postura firme contra Hamás, afirmando que “no hay otra opción” que la destrucción del grupo para un futuro mejor en Gaza, e indicó su interés en apoyar la reconstrucción de la zona una vez concluida la guerra.
En respuesta a la invitación de Hamás, Elon Musk declinó a través de su cuenta de X (antes Twitter), citando preocupaciones de seguridad. Sin embargo, reconoció que una Gaza próspera a largo plazo sería beneficiosa para todas las partes involucradas.
Antes de esta interacción, Musk había sido acusado de antisemitismo por respaldar un post antisemita en la red social X. El post en cuestión afirmaba falsamente que miembros de la comunidad judía estaban incitando al odio contra los blancos, a lo que Musk respondió: “Has dicho la pura verdad”.
Estas acusaciones han llevado a una condena generalizada por parte de figuras importantes, incluyendo al director general de la Liga Antidifamación (ADL), Jonathan Greenblatt, quien criticó el apoyo de Musk a la teoría de la conspiración antisemita. Esta situación también ha provocado una reacción negativa en las redes sociales y en los medios de comunicación, con publicaciones como The Atlantic y MediaMatters acusando a Musk de fomentar discursos de odio.
