Vidas que inspiran: Chris Gardner, el hombre detrás de ‘En busca de la felicidad’
Las adversidades que ha enfrentado Chris Gardner a lo largo de su vida se quedan cortas si las comparamos con la exitosa película.
Una película memorable protagonizada por Will Smith es En busca de la felicidad (The Pursuit of Happyness), una historia de perseverancia, determinación y resiliencia. Esta cinta se inspira en la autobiografía del mismo título del emprendedor, conferencista y filántropo Christopher Paul Gardner, mejor conocido como Chris Gardner, quien nació en Luisana, Estados Unidos en 1954.
Las adversidades que ha enfrentado Chris Gardner a lo largo de su vida no tienen comparación con las presentadas en la exitosa película. Por ejemplo, la cinta no aborda su dura infancia. Su padre los abandonó a él, su madre y hermanas (Chris Garner lo volvió a ver solamente dos veces más: a los veintiocho años y en el funeral de este).
Creció en Milwaukee, en el estado de Wisconsin, y por azares del destino: él cuenta que ahí se descompuso el automóvil en el que viajaban hacia Canadá. Tuvo un padrastro abusivo y, debido a que su madre fue encarcelada, estuvo un par de veces en un centro de acogida de menores donde fue violado. La situación no mejoró con el paso del tiempo.
Los orígenes de la búsqueda de la felicidad
A pesar de formar parte del cuerpo médico de la Marina estadounidense y colaborar con el centro médico de la Universidad de California (UCLA) a mediados de la década de los setenta, vio frustrado su sueño de estudiar medicina. ¡Incluso participó en una investigación sobre los fosfatos de alta energía en los músculos del corazón durante la cirugía a corazón abierto con un reputado cardiólogo! Debido a que este proyecto se quedó sin financiamiento, sus problemas económicos continuaron.
A pesar de tener experiencia como asistente de laboratorio, Chris Gardner consideró que era más lucrativo dedicarse a la venta de suministros médicos. La idea no era mala, pero estos equipos eran todo un lujo (en el filme se muestra a un Will Smith invirtiendo todo lo que tenía para comprar aparatosas unidades de densitometría ósea y revenderlas). Se divorció de su primera esposa y estuvo tras las rejas por no poder pagar multas de tráfico y quedó en bancarrota. Con el paso del tiempo, se dio cuenta de que estaba estancado hasta que, en 1981, tuvo un encuentro con un hombre que manejaba un Ferrari rojo y, cuando supo que se dedicaba a ser agente de bolsa, decidió dar un giro laboral para poder salir adelante junto con su hijo Christopher Jr., quien quedó bajo su custodia a los dos años de edad.
Chris Gardner salió de la calle
Chris Gardner decidió tomar un curso para ser agente de bolsa y fue persona sin techo mientras estudiaba y trabajaba sin rendirse, dormía donde podía. ¿Recuerdan la escena de la película donde padre e hijo duermen en un baño público del Metro de San Francisco? Fue real y lo hicieron durante un par de semanas. También dormían en las áreas de espera de los aeropuertos de Oakland y San Francisco. Cuando Chris Gardner entró como aprendiz a la Bolsa de Valores, ¡hacía unas 200 llamadas diarias! El poco dinero que ganaba lo usaba para pagar la guardería y las necesidades básicas de Christopher Jr. Al cabo de un año, pasó el examen para ser agente de bolsa y entró a trabajar de tiempo completo a Bear Steams & Company (una banca de inversión que fue vendida al banco JPMorgan Chase durante la crisis financiera de 2008).
Un lustro después, Chris Gardner emprende en su departamento y funda Gardner Rich & Co. Su primer escritorio fue la misma mesa donde desayunaba, comía y cenaba. ¿Cuánto invirtió? 10,000 dólares. ¿En cuánto la vendió? En 2006 cerró un trato millonario por su primera empresa. Poco después se aventura con Christopher Gardner International Holdings, que tiene oficinas en Nueva York, Chicago y San Francisco. Chris Gardner tenía tan solo 34 años de edad cuando ganó su primer millón de dólares. ¿Qué se compró? El Ferrari negro que había pertenecido a Michael Jordan.
Las lecciones del “CEO de la felicidad”
Actualmente, este bróker multimillonario conocido también como el “CEO de la felicidad” se dedica a realizar labores filantrópicas extraordinarias como financiar viviendas asequibles para familias de escasos recursos. Se ha abocado a ofrecer orientación profesional y la formación laboral a poblaciones vulnerables como los que se encuentran en situación de calle en Chicago. Como ponente, visita infinidad de países y su esfera de influencia es amplia: crea cientos de fuentes de empleo invirtiendo en mercados emergentes de países como Sudáfrica. Una de sus frases más memorables es:
“Sólo puedes depender de ti mismo, la caballería no va a venir a rescatarte”.
La lección más importante que nos enseña la vida Chris Gardner es que el trabajo duro vale la pena. Sin estudios universitarios, él salió adelante y jamás renunció a hacer realidad sus sueños. En una entrevista con Oprah, Chris Gardner afirmó que su mayor inspiración era su madre: “Elegí abrazar el espíritu de mi mamá quien, a pesar de que ver negados, aplazados y destruidos a demasiados de sus propios sueños, me inculcó que podía soñar.” También tiene una anécdota en la que su progenitora le dijo un día mientras veían un partido de baloncesto: “Hijo, si así lo quieres, un día podrías ganar un millón de dólares ”.