Seamos honestos: entender el sentido del humor de las personas no siempre es fácil. El sarcasmo, el doble sentido y los juegos de palabras a veces dificultan la comunicación entre humanos, un problema que ahora también tienen las máquinas. Por eso, la nueva Inteligencia Artificial de Google representa un hito tecnológico, ya que promete entender los chistes de los usuarios.
Esta semana, Google Research dio a conocer Pathways Language Model (PaLM), su nuevo modelo de lenguaje capaz de programar, resolver problemas matemáticos y explicar chistes. Su eficiencia en el aprendizaje es del 57.8%, “la más alta alcanzada hasta ahora para los modelos de lenguaje a esta escala”, detalla un comunicado.
La empresa explica que la recién lanzada Inteligencia Artificial (IA) se creó a partir de una base de datos con 780,000 millones de tokens. Combina “un conjunto de datos multilingües”, que incluyen documentos web, libros, Wikipedia, conversaciones y código GitHub, y los procesa a través de 540,000 millones de parámetros.
PaLM también usa un vocabulario ‘sin pérdidas’ que “preserva todos los espacios en blanco”, así como la división de caracteres de Unicode, que no está en el vocabulario en bytes, lo que resulta “especialmente importante” para programar, subrayan.
“Logra resolver problemas matemáticos sencillos y razonar la respuesta bastante bien, se acerca al promedio del 60% de problemas resueltos por niños de 9 a 12 años, que son el público objetivo del conjunto de preguntas”, indicó Antonio Ortiz, consultor en tecnología, en el blog de Google.
La novedosa IA del gigante tecnológico se basa en el aprendizaje de ‘pocos disparos’, que reduce la cantidad de ejemplos necesarios en el entrenamiento, con tareas específicas para adaptarlo a una sola aplicación.
“PaLM ha demostrado capacidades innovadoras en numerosas y muy difíciles tareas”, aseguró la empresa propiedad de Alphabet.
Detallan que su IA es capaz de programar traduciendo un código “de un lenguaje a otro”, escribiendo código con base en “una descripción natural del lenguaje”, así como de “solucionar errores de compilación”. Por ello, puede resolver problemas matemáticos simples y hasta explicar un chiste, desglosando los elementos que lo componen para darle sentido y contexto.
Para explicarlo mejor, presentaron algunas muestras de lo que puede hacer la Inteligencia Artificial de Google en cuanto a comprensión y generación del lenguaje, razonamiento y tareas de programación.
Uno de los ejemplos fue pedirle a PaLM adivinar una película con solo cuatro emojis: un robot, un insecto, una planta y el planeta Tierra. Al sistema se le dieron cuatro opciones: L.A. Confidential, Wall-E, León, el profesional, BIG y Rush. Al final, la IA escogió la respuesta correcta: Wall-E.
Otra tarea fue elegir en una lista de palabras dos que estuvieran asociadas a ‘tropiezo’ (stumble, en inglés). Su respuesta fue muy acertada, ya que seleccionó ‘caída’ (fall) y ‘traspié’ (trip).
Aunque por ahora es capaz de acertar casi 6 de cada 10 ocasiones, es un gran paso en el camino al entendimiento entre humanos y máquinas. También abre nuevas posibilidades en el desarrollo de sistemas de Machine Learning y asistentes virtuales, entre otros.
