Los indicadores globales apuntan a que México se posicione como economía líder en los próximos 10 años.
Con una ubicación geográfica estratégica, estímulos fiscales, excelentes cadenas de suministro, costos competitivos y una fuerza de trabajo talentosa y joven, México se ha convertido en la 15º economía más grande del mundo, por consiguiente, en uno de los países emergentes más atractivos para los inversionistas extranjeros.
Según el World Investment Report 2022, publicado por la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD), en 2021 nuestro país se ubicó como el 10º receptor mundial de inversión extranjera directa (IED) y el 5º entre las economías en desarrollo.
Estos datos son bastante alentadores. Hay que tener en cuenta que durante la pandemia muchas empresas transitaron por una etapa de mucha incertidumbre, inestabilidad y poco crecimiento.
México, ¿una superpotencia?
Pese a ello, México nuevamente ha demostrado ser uno de los países más atractivos y con mayor apertura del mundo para la importación y exportación. Esto explica el reciente y fuerte aumento en el flujo de efectivo en el país y su papel como líder en la región.
Y es que de acuerdo con los datos proporcionados por el Banco de México, en 2021 las exportaciones de bienes y servicios desde México sumaron más de 465 mil de millones de dólares, equivalentes a 49% del PIB nacional, encontrándose la producción mexicana totalmente integrada a las cadenas globales de valor. Asimismo, en América Latina, las exportaciones de México representaron el 37.9% del total de la región en 2021, consolidándose como la principal potencia exportadora. En particular, se destacan las exportaciones mexicanas de manufacturas de media y alta tecnología, representando más de la mitad en la región.
Este crecimiento no resulta difícil de asimilar si se tiene en cuenta que México tiene muchos factores a su favor, además de un enorme potencial humano y amplios recursos para ser una economía líder a nivel mundial. Sosteniendo esta premisa, me resulta importante mencionar algunas de las fortalezas que nos brindan un potencial único y excepcional de crecimiento
En primer lugar, debemos mencionar la posición clave de México. La proximidad de nuestro territorio con la economía más grande del mundo -Estados Unidos- genera un derrame económico de billones de dólares en productos y cada vez más servicios.
Enlazado a lo anterior, México es uno de los mayores exportadores a los Estados Unidos; la tendencia muestra que el país norteamericano cada vez importa menos de China, reubicando su producción en el país vecino de México. De hecho, al día de hoy, México es el segundo socio comercial más grande para Estados Unidos.
En tercer lugar, hay que destacar la gran demanda de talento y capital humano especializado. Actualmente, nuestro país es un proveedor primario de profesionales. ¿La razón? La creatividad y la capacidad del talento mexicano hacen que empresas de todo el mundo apuesten fuertemente por ellos.
Otro punto clave es que tenemos vigentes tratados de comercio que permiten la actividad de maquiladoras de empresas americanas en México. Como consecuencia de ello, cada vez más estadounidenses compran propiedades y terrenos en México, elevando así la calidad de vida y la plusvalía del país.
Finalmente, pero no menos importante, se debe destacar el enorme consumo dentro del mercado interno. En 2021, el producto interior bruto de México (PIB) ascendió aproximadamente a 1.322 billones de dólares. Se estima que llegará a los 1.646 billones en 2027. Así también, cada vez se exige mejor calidad en los productos y servicios, demanda que sí o sí requiere de la adopción digital.
Transformación digital en el país
Sobre la transformación digital en el país, de acuerdo con datos de LNS Research, 29% de las empresas cuentan con programas de transformación digital en fases piloto, 16% ya ha implementado su transformación digital acorde a sus objetivos, 23% ha presupuestado iniciar sus proyectos en el siguiente año y 6% lo prevé para dentro de los siguientes tres años, lo que muestra la importancia de estos temas.
Dicho esto, es fundamental entender que para que una economía crezca debe haber grandes cantidades de consumo. Y, como todos sabemos, hoy en día las ventas se generan principalmente mediante el comercio electrónico. Por lo mismo, la incorporación de la tecnología debe ser una prioridad para las empresas de todos los sectores.
En definitiva, México tiene todas las cualidades para posicionarse como una economía líder a nivel mundial. Por lo tanto, es clave entender que un país con mayores fortalezas en el ámbito de la innovación, con consumidores más exigentes, empresas más dinámicas, trabajadores más preparados y un gobierno promotor, siempre estará mejor preparado para enfrentar los retos que se le presente. Sobre todo, para seguir siendo competente y destacar en el mercado global.