Tras varias semanas de especulaciones, Google presentó Bard, su propio chatbot basado en inteligencia artificial (IA). Este nuevo buscador conversacional sería el rival directo (y más fuerte) de ChatGPT, la herramienta estrella de OpenAI.
Desde que ChatGPT se lanzó oficialmente, el 30 de noviembre de 2022, ha cautivado a especialistas y usuarios por igual. Incluso Microsoft invirtió recientemente cerca de 10,000 millones de dólares para integrar ChatGPT a su buscador Bing. Su sistema de inteligencia artificial es capaz de generar textos coherentes y naturales, que son difíciles de distinguir de los contenidos escritos por humanos.
Como respuesta, Google presentó Bard, “un servicio de inteligencia artificial conversacional experimental”. Es decir, su propia herramienta de búsqueda y generación de textos basada en IA.
“Bard busca combinar la amplitud del conocimiento del mundo con el poder, la inteligencia y la creatividad de nuestros grandes modelos de lenguaje. Se basa en información de la web para proporcionar respuestas frescas y de alta calidad”, explicó Sundar Pichai, CEO de Google y Alphabet al anunciar la herramienta en Twitter.
Desarrollada en 2017, LaMDA significa ‘Language Model for Dialogue Applications’, o bien, ‘Modelo de lenguaje para aplicaciones de diálogo’, en español. Es una tecnología basada en redes neuronales, entrenada para procesar grandes cantidades de datos y texto. Esto le permite generar respuestas fluidas y dinámicas con un lenguaje natural.
LamDA saltó a la fama en junio de 2022, cuando un ingeniero de Google llamado Blake Lemoine aseguró que esta IA habría cobrado conciencia de sí misma y “es capaz de expresar sentimientos y pensamientos”, según recoge The Verge. En respuesta, el gigante tecnológico negó la información de inmediato, y poco después se supo que el informante que ‘habló de más’ fue despedido.
En septiembre pasado comenzaron a hacer pruebas con LaMDA y, finalmente, Google encontró un buen uso para el polémico modelo de lenguaje: crear su robot conversacional.
Al parecer, Google Bard funcionará de forma muy similar a ChatGPT, pero con una GRAN diferencia: estaría integrado a los recursos del buscador Google Search.
Chat GPT aún tiene una limitante: no se alimenta de información en tiempo real de internet. Sus respuestas se basan en datos e información previa a 2021, procesada mediante machine learning y otras herramientas de IA.
Por su parte, el buscador de Google lleva más de dos décadas funcionando más o menos igual. Los usuarios ingresan una pregunta, frase, palabras clave o imagen, y encuentran infinidad de enlaces que los llevan a la información que buscan (casi siempre). En cambio, ChatGPT las ofrece en forma de textos bien seleccionados, digeridos y redactados para una lectura simple.
En este punto, el paso más lógico es combinar las capacidades de LaMDA con los recursos de Google Search, confirmó la compañía. Además de implementar las búsquedas y resultados con lenguaje natural, Bard utilizará información de Internet, actualizada y en tiempo real, para ofrecer respuestas de alta calidad.
“Pronto, verás funciones impulsadas por IA en el buscador que extraerán información compleja y múltiples perspectivas en formatos fáciles de digerir, para que puedas comprender rápidamente el panorama general y aprender más de la web”, señaló Sundar Pichai en un comunicado.
El CEO de Google agregó que Google Bard está disponible desde hoy para un grupo reducido de ‘evaluadores de confianza’ externos y estará disponible para el público “en las próximas semanas”.
