¿Qué tienen en común Gina Carano y Elon Musk? La actriz robó titulares tras informar a través de sus redes sociales que presentó una demanda en contra de Disney y Lucasfilm por discriminación y despido improcedente. Ambas marcas cortaron vínculos laborales con la estrella de The Mandalorian en 2021, posterior a que Carano realizara una serie de publicaciones en redes sociales que, a ojos de un portavoz de Lucasfilm, resultaban “aborrecibles e inaceptables”.
La demanda presentada el martes 6 de febrero ante el tribunal federal de California es una muy particular, no sólo por su lenguaje juguetón que remite al universo de La guerra de las galaxias, sino también porque cuenta con el financiamiento del magnate Elon Musk. ¿Cómo fue esto posible? A continuación, te explicamos todo lo que debes saber de este enfrentamiento legal entre Carano y la Casa del Ratón.
Nacida en Texas, Gina Carano es una histrión estadounidense y exluchadora de artes marciales mixtas. Inició su carrera actoral inmediatamente después de retirarse del deporte en 2009. Consiguió su primer rol importante en la película de acción Agentes secretos (2011), del director Steven Soderbergh. A ésta le siguieron otro puñado de películas, incluidas las taquilleras Rápidos y furiosos 6 (2013) y Deadpool (2016). Sin embargo, no fue sino hasta 2019 que Carano alcanzó mayor popularidad gracias a su participación en el aclamado show The Mandalorian de Disney Plus.
En aquella serie live-action de la franquicia Star Wars, la actriz encarnó a Cara Dune, una antigua rebelde que deviene una habilidosa mercenaria tras la caída del Imperio Galáctico. Eventualmente, ella forja una alianza con Djin Darin (Pedro Pascal) y, más tarde, acepta el cargo de comisaria de la Nueva República.
Carano dio vida a aquel personaje durante dos temporadas y en un total de siete episodios. El plan era que continuara siendo una presencia recurrente en las siguientes entregas de The Mandalorian y que apareciera también en un proyecto de show titulado Rangers of the New Republic. Sin embargo, Disney y Lucasfilm despidieron a la intérprete en febrero de 2021.
Posteriormente, la tejana de posturas políticas abiertamente conservadoras se asoció con la compañía de medios The Daily Wire, con la cual levantó el western Terror on the Prairie (2022). Asimismo, coestelarizó la comedia My Son Hunter (2022), distribuida por el sitio web de extrema derecha Breitbart News.
La salida de Gina Carano de The Mandalorian estuvo precedida por acciones y comentarios suyos en redes sociales que desde 2020 generaron revuelo. En ellos se adivinaba lo que presuntamente era una burla a la comunidad trans, un llamado a no usar cubrebocas durante la pandemia y un señalamiento al dsupuesto fraude cometido en las últimas elecciones presidenciales de EE.UU., donde el demócrata Joe Biden derrotó al republicano Donald Trump. No obstante, la gota que derramó el vaso fue una historia de Instagram donde la actriz compartía la siguiente aseveración:
“Los judíos eran golpeados en las calles, no por soldados nazis sino por sus vecinos… incluso por niños. Debido a que la historia se edita, la mayoría de la gente hoy en día no se da cuenta de que para llegar al punto en el que los soldados nazis podían acorralar fácilmente a miles de judíos, el gobierno primero hizo que sus propios vecinos les odiaran simplemente por ser judíos. ¿En qué se diferencia eso de odiar a alguien por sus opiniones políticas?”
Las palabras anteriores resultaron particularmente escandalosas. De ellas se interpretaba que Carano estaba equiparando la negativa en contra de los simpatizantes del partido republicano con el odio padecido por los judíos en tiempos del Holocausto. El mismo mes en que la histrión lanzó aquella polémica publicación, se informó que Disney y Lucasfilm habían optado por despedirla.
En la demanda levantada por Gina Carano, ella acusa directamente a Disney y Lucasfilm de haberla despedido sin ningún fundamento legal válido y de haber provocado que UTA —la agencia de talento que en aquel entonces la representaba— decidiera dar por terminada su relación.
La expeleadora alega también haber sufrido discriminación de género por parte de ambas marcas. ¿En qué sentido, según Carano? En que la sancionaron duramente por emitir un comentario político, mientras que dos de sus coestrellas masculinas de The Mandalorian, es decir, Pedro Pascal y Mark Hamill, a pesar de que en redes sociales han comparado a Trump y sus seguidores con Adolfo Hitler y los nazis, en su caso no han recibido ni la más mínima llamada de atención.
La parte acusatoria afirma que Carano fue víctima de acoso e intimidación por no hallarse en sintonía con las posturas liberales de la Casa del Ratón. En su cuenta de X (antes Twitter), la actriz dijo que quisieron silenciarla y destruirla por no estar “en línea con la narrativa aceptable de la época”.
“Hace poco tiempo, en una galaxia no muy lejana, los demandados dejaron claro que en su imperio sólo era aceptable una ortodoxia de pensamiento, palabra o acción, y que no habría tolerancia para quienes se atrevieran a cuestionarla o no la cumplieran plenamente”, se lee en la demanda, en un fragmento escrito cual si fuera un prólogo de La guerra de las galaxias (vía Deadline). “El imperio de la ley sigue siendo la base del régimen de los demandados… y Carano ha vuelto para exigir que se les haga responsables de sus acciones intimidatorias, discriminatorias y de represalia”.
Dentro del documento legal, asimismo se expone que Disney y Lucasfilm pidieron a Gina Carano que se reuniera con representantes de la Alianza de Gays y Lesbianas contra la difamación (GLAAD, por sus siglas en inglés) y que ofreciera una disculpa por acciones suyas que fueron interpretadas como un ataque a la comunidad. Se dice que la histrión se negó, insistiendo en su inocencia, y que tampoco aceptó reunirse con Kathleen Kennedy, presidenta de Lucasfilm, ni con empleados LGBT de la compañía, en lo que supuestamente era otra maniobra para presionarla e intimidarla.
De esta demanda, Carano espera obtener $75 mil dólares por daños y prejuicios. Además, exige que Lucasfilm la contrate de nuevo y que le devuelva su papel en The Mandalorian.
En agosto de 2023, el multimillonario Elon Musk, dueño de X, informó que su plataforma respaldaría monetariamente a todos los usuarios que fueran tratados “injustamente” por sus empleadores a raíz de publicaciones o interacciones que hayan hecho desde dicha red social. Básicamente, Musk estaba garantizando que pagaría los abogados de todo aquel que fuera despedido por tuitear o darle like a algo que no resultara del agrado de su jefe. Y al parecer, Elon Musk izo válida su promesa con Gina Carano.
“Como muestra del compromiso de X Corp. con la libertad de expresión, estamos orgullosos de prestar apoyo financiero a la demanda de Gina Carano, permitiéndole reivindicar sus derechos de libertad de expresión en X y la posibilidad de trabajar sin intimidación, acoso o discriminación”, declaró en un comunicado Joe Benarroch, jefe de operaciones comerciales de X (vía Variety).
Por su parte, la intérprete contó que desde 2023 un abogado contratado por la compañía de Elon Musk se puso en contacto con ella para investigar acerca de su situación con Disney y Lucasfilm. “Resulta que después de enviarles toda la información que pude reunir en los últimos meses, mis ahora abogados y X creen de todo corazón en mi caso y siguen adelante”, remarcó Carano en un tuit (vía).
Respecto a X, la histrión la definió, según una cita de The Hollywood Reporter, como “uno de los últimos destellos de esperanza para la libertad de expresión en el mundo”.
