Solamente una de cada cinco personas que trabaja en el sector STEM es mujer, señala la asociación Women in Tech. Diferentes organzaciones que agrupan este nicho, se han dado cuenta que llega un momento en la vida de la mujer emprendedora en que su avance se ve coptado y más en el sector.
“Históricamente hemos tenido poca representación de mujeres en la industria de tecnología y, si bien cada día vamos avanzando, aún queda mucho camino por recorrer” dijo Antonia Rojas Eing, venture capitalist y especialista en el ecosistema emprendedor de la Latam.
Xepelin, una fintech dedicada a ofrecer soluciones financieras para Pymes, organizó por primera vez en México su foro Women in Tech. En él, mujeres líderes debatieron sobre las posibles vías que existen para cerrar la brecha de género en la industria de tecnología y el ecosistema startup.
Al evento asistieron una centena de invitadas y un panel de destacadas mujeres líderes de startups de tecnología como Maya Dadoo, Co-founder y CEO de Worky, la startup de software para gestión de gestión de nómina y RRHH, Courtney McColgan Founder y CEO de Runa, startup de HR Tech, y María Pía Lindley, General Manager de DiDi Food Latam.
Antonia Roja, quien también fungió como moderadora, destacó que la complementariedad y diversidad en los equipos es fundamental para apalancar las diferentes perspectivas y de esta manera llevar a las compañías a su máximo potencial.
Según un estudio de Deloitte Global, el 33% de los colaboradores de las empresas de tecnología serán mujeres para finales de 2023. Al respecto, las tres panelistas coincidieron que cada vez más se ven empresas tecnológicas en las que más mujeres buscan abrirse camino.
¿Cómo puede la mujer seguir creciendo a pesar del panorama empresarial actual y del poco optimismo que prevalece en el mercado tras la pandemia?
María Pía, de DiDi Food, consideró que es importante estar consciente de lo que no quieres para trazarte un camino que seguir. Además, recomendó hacer un due diligence y hablar con varias personas para encontrar aquella empresa que realmente comparte tus valores.
¿Cómo capitalizan su posición estas mujeres líderes en el campo de la tecnología? Las tres coincidieron en que han tenido que hacer un fuerte trabajo personal con apoyo de especialistas y coaches, porque aún existen sesgos y roles muy marcados entre hombres y mujeres que son complicados de romper.
Por ejemplo, Courtney McColgan recordó que cuando se embarazó de su primer hijo viajaba constantemente a Perú dejando a su pequeño recién nacido la mayor parte de la semana. Muchos le preguntaban cómo era posible eso, algo que no se le preguntaría a un hombre, pues se asume que debe trabajar.
Maya recordó la época en que estudiaba su maestría en Estados Unidos y encontraba que las mujeres en puesto de liderazgo contaban con el apoyo de sus esposos en casa, quienes no trabajaban y las impulsaban en su desarrollo profesional, algo no muy frecuente en países latinos. “Hay que casar bien tu carrera profesional y tu pareja”, destacó.
Courtney McColgan señaló que estar en una posición líder se trata de un tema de sensibilidad y de cómo encontrar maneras de lograr mejores interacciones. Maya subrayó la importancia de estar cercana a los equipos. En su caso dice que es muy importante desarrollar a las mujeres para tener conversaciones difíciles, como negociación de sueldos o para asumir nuevas posiciones.
Sobre el tema, María Pía comentó que, al contrario de las finanzas, que son exactas y técnicas, el liderazgo no es una práctica dura. Sobre todo, cuando se manejan equipos diversos, hay que ser directas y en su caso dice poner estándares altos. Sin embargo, asegura que lo más importante es tu equipo.
Las empresas se tratan de personas, están llenas de gente y tienes que preocuparte por la gente es lo único.
María Pía Lindley General Manager de DiDi Food
“Crecí tratando de comprobar que podía con mucho y ha sido un trabajo constante para reconocer que yo sola no puedo, pero sí con un equipo”, reveló Maya.
Las tres destacaron que hay que construir redes de apoyo. Es importante encontrar recursos y tener un grupo de amigas y amigos para que te apoyen en cada reto de tu vida. También es indispensable ofrecer mentorship a los equipos, sobre todo a las mujeres y ayudarlas a desarrollar su capacidad de elección y negociación.
En particular, Maya destacó que en las organizaciones existe una brecha del 20% en las compensaciones porque no existen métricas y datos en recursos humanos. Hay que proporcionar la data para ir acortando las brechas y lograr la equidad, destacó.
Además, subrayó que se debe trabajar para cortar la brecha de liderazgo; desarrollar a la mujer para se apalanque en resolver problemas, que aprenda a delegar, comunicar, saber pedir ayuda y exigir y pedir un asiento en la mesa.
