¿Qué inspira a los niños emprendedores? La tarea de emprender no la lleva a cabo cualquiera, hay que ser de espíritu muy libre y creativo. Además, contar con el apoyo suficiente que permita hacer los sueños realidad.
Las cualidades mencionadas fueron reunidas por niños y niñas que se apasionaron por un tema y creyeron en él; tanto, que el día de hoy poseen emprendimientos que destacan su esfuerzo y talento. A continuación, un listado de los niños emprendedores, en homenaje al próximo Día del Viño y la niña, este 30 de abril.
Desde los 7 años vende manzanas cubiertas. Cambió su fiesta de 15 años por un negocio llamado Mamzamanía, que se ubica en una plaza de su natal Tijuana, Baja California. La fruta tiene cubiertas de chile, cacahuate japonés, caramelo, chocolate o nuez.
Presentó su proyecto en Shark Tank México a los 7 años de edad, el cual es un shampoo orgánico contra los piojos. Cuando se contagió en la escuela, recurrió a los remedios de las farmacias, pero le dejaron costras por la agresividad de sus ingredientes. En compañía de su papá decidió buscar una química que les ayudará a crear una sustancia más amigable.
Su interés por crear este producto nació cuando le detectaron diabetes y sobrepeso a su papá. Decidieron dejar atrás esa vida azucarada a través de un producto innovador llamado Suitis Galletas 100% Saludables, con el que ha obtenido varios premios en ferias científicas locales y hasta internacionales.
El emprendedor regiomontano a los 16 años ganó el Global Student Entrepreneur Awards por crear un sostén que detectaba el cáncer de mama, que patentó a la edad de 18 años con el nombre de Eva tech. Ahora maneja Edén, una plataforma donde médicos de radiología pueden almacenar, analizar, y enviar resultados de estudios como resonancias magnéticas, ultrasonidos y ecografías.
A los 9 años Leanna comenzó a vender productos de limpieza corporal en frascos de comida para bebé con las recetas de su abuela. Ahora su empresa factura 100,000 dólares anualmente y con sus ingresos creó su una fundación para darle mejores oportunidades a niños de bajos recursos en Haití, su país de origen.
Con solo 16 años, el entonces adolescente sin conocimientos técnicos y solo con tutoriales obtenidos de internet, hizo una impresora 3D. Ha sido invitado a dar charlas sobre su experiencia y también ha dado asesorías a estudiantes universitarios de ingeniería. Se convirtió en todo un icono del «Hágalo usted mismo».
La pequeña emprendedora creó su firma a los 10 años de edad, la cual se encarga de desarrollar e implementar Programas educativos de emprendimiento para niños y jóvenes. Su imagen alcanzó gran exposición al presentar su empresa en el programa Shark Tank Colombia, donde impresionar a los ‘tiburones’ y ganó una inversión de 15,000 dólares para su negocio.
Con 9 años fundó su empresa, que produce jabones naturales. Comenzó a investigar sobre cómo fabricar jabones artesanales en línea, con la idea de venderlos para reunir dinero y comprar una consola de videojuegos. El resto es historia… hoy en día distribuye sus productos en Aruba, Estados Unidos y México.
Hace 10 años, el ‘Niño banquero’, como es conocido en su tierra llegó a ser muy famoso luego de fundar el Eco Banco del Estudiante, con un sistema financiero destinado a favorecer a miles de niños y adolescentes de escasos recursos. El proyecto que consiste en intercambiar dinero por productos reciclables ha causado furor en todo el mundo.
En conjunto con su compañera Lucía fuentes crearon la app que obtuvo el primer lugar de la categoría Junior, con más de 1,800 propuestas tecnológicas de 115 países, en el evento internacional de tecnología e innovación Technovation Girls Challenge. La plataforma quiere combatir la desinformación a la que se enfrentan los migrantes que llegan a Chile. Antonella confiesa que la inspiración surgió tras haber pasado el difícil proceso de ir de un país a otro.
