
El Grupo Peak, dirigido por Arturo González Cantú y Víctor Hugo Sepúlveda, que se dedicaba a ofrecer inversiones sin autorización de las autoridades, se declaró en quiebra la semana pasada. Los fundadores desaparecieron y se llevaron más de 800 millones de pesos de sus clientes.
A través de una reunión vía Zoom, a la que los fundadores no se presentaron, la empresa se declaró en quiebra. En este caso, persistió la falta de transparencia para saber cómo se emplearon los recursos, mientras que los directivos cesaron sus comunicaciones. Incluso los trabajadores de Peak desconocen los detalles sobre sus liquidaciones ni sobre el destino de los recursos de los inversionistas, como recopila Stephanie León, de Vanguardia.
Los afectados dijeron que González Cantú compartía en sus redes sociales fotos de autos y relojes lujosos, lo que atrajo la atención para entregarles recursos que supuestamente serían invertidos con altos márgenes de rentabilidad. También organizaban cenas y desayunos de lujo para atraer a más inversionistas en San Pedro de los Garza, Nuevo León.
El Grupo Peak manipulaba a los inversionistas estafados bajo la promesa de entregarles lo invertido “en especie”, en forma de terrenos y otros bienes, además de amenazarlos de perder la oportunidad de recuperar sus recursos si denunciaban o hablaban con medios de comunicación, según reporta Sanjuana Martínez en La Jornada.
Por su parte, Víctor Amaro, de info7, encontró que la gama de personas estafadas por el grupo Peak fue de pasantes de medicina por 20,000 pesos mexicanos, hasta inversionistas millonarios canadienses. Amaro señala que el mínimo de inversión eran 20,000 pesos, con la promesa de retornos de hasta el 22% anual.
David Cázares, de info7, reportó que las oficinas de Grupo Peak se encuentran abandonadas, y que incluso se fueron dejando un adeudo por la renta de las oficinas. La empresa estuvo instalada en la plaza UMA durante los últimos cuatro años.
González Cantú y Sepúlveda fueron denunciados por fraude ante la Fiscalía General de Justicia de Nuevo León. Las denuncias se encuentran aún en proceso de integración.
