¿Qué pasaría si se creara un foro donde todos platicaran sus fracasos, los compartieran con la audiencia y éstos funcionaran como aprendizaje para otras personas? Esta idea fue la que inspiró a un grupo de amigos a crear Fuck Up Nights, eventos que tienen precisamente ese fin: quitar el tabú del fracaso y usarlo como una enseñanza.
“Al principio era casi una utopía usar el fracaso para impulsar a la gente, crear comunidad y cambiar la cultura general sobre la percepción del éxito”, dijo Carlos Zimbrón, cofundador de Fuck Up Nights, en entrevista para Emprendedor.com.
Las Fuck Up Nights son reuniones gratuitas que se llevan a cabo mensualmente. El ambiente es relajado, “como entre amigos”, donde los asistentes toman cerveza, platican y se divierten. Es como una especie de reunión de alcohólicos anónimos donde el participante es un “fracasado rehabilitado” que en 7 minutos cuenta cómo falló, cómo lo superó y qué lecciones extrajo de la experiencia.
“Todavía vemos el acercamiento al fracaso como un paso necesario para llegar al éxito. No necesariamente es un puente. Es uno de los mantras de la cultura startupera estadounidense nos alimenta. Nosotros no queremos simplemente fracasar para poder llegar al éxito”, señaló el entrevistado.
Zimbrón cuenta que este concepto surgió cuando estaba reunido con un grupo de amigos “tomando mezcales” y surgió la discusión de por qué cuando alguien platica sus proyectos individuales sólo habla de los aspectos positivos y agradables de él, “pero siempre hay errores y fracasos, que finalmente son lo más valiosos para un emprendedor”, afirma, “de hecho, resultan refrescantes”. Y todos los habían tenido: ideas fallidas, pésimos socios, bolsillos vacíos y otros cuentos de terror.
Fue así como, en septiembre de 2012, lanzaron su primera convocatoria entre familiares, amigos y conocidos para escuchar a tres exponentes de distintos ámbitos que hablaron de sus fracasos. Ésa fue la primera Fuck Up Night, con cerca de 35 asistentes. Actualmente, este movimiento 100% mexicano tiene presencia en 215 ciudades, 62 países, historias en más de 26 idiomas, más de 15 mil casos y más de un millón de asistentes.
“Una de las cosas que hemos aprendido en estos 10 años es que se piensa que el fracaso está muy relacionado con las culturas latinoamericanas, pero no es así. Es algo universal. Si hay conceptos específicos, pero el fenómeno es global”, señaló el cofundador de FuckUp Nights.
Dentro de los ponentes ha habido todo tipo de profesiones e historias, desde empresarios y médicos, hasta magos, dueños de sex shops, estilistas, bailarines y políticos. “Son personas exitosas que en algún momento han fracasado”, agrega Zimbrón.
Las Fuck Up Nights celebrarán su 10° aniversario el 1 y 2 de diciembre con el The FuckUp Sxmmit, un festival de innovación con paneles, historias de fracaso y música que nos invitan a mirar el fracaso desde la perspectiva de expertas y expertos de distintas industrias y distintas generaciones.
“Las derrotas pueden ser distintas a lo que veíamos hace 10 años por el tipo de industrias que hay en la actualidad. Sin embargo, las razones del fracaso siguen estando relacionadas a la mala planeación, una pobre selección de socios, el manejo de las expectativas”, señala Carlos Zimbrón. “El fracaso va a suceder y la manera de manejarlo debe ser diferente”.
Encuentra más información aquí para asistir a The FuckUp Summit.
