Impact Plastics y su CEO, Gerald O’Connor, han sido acusados de impedir que sus trabajadores abandonaran el parque industrial durante el huracán Helene. La imprudencia de este directivo dejó como resultado dos colaboradores fallecidos, cuatro aún desaparecidos y cinco más que lograron ser rescatados en plena inundación. 

El CEO y la empresa ahora están siendo demandados por la familia de uno de los fallecidos que alega la muerte se pudo prevenir de haber actuado de acuerdo con los protocolos adecuados. 

Ganancias por encima de la seguridad 

A finales de septiembre de 2024 llegó Helene, un poderoso huracán categoría cuatro que azotó el sureste de Estados Unidos. Considerado uno de los más destructivos en aquel país, este fenómeno terminó con la vida de aproximadamente 241 personas que residían en localidades como Florida, Carolina del Norte y del Sur, o Tennessee. 

Fue precisamente el estado de Tennessee el que protagonizó una de las más insólitas y lamentables historias en donde al menos dos personas perdieron la vida y otras cuatro continúan desaparecidas. El causante: Gerald O’Connor y su empresa Impact Plastics. 

Las autoridades adivirtieron sobre el poder de aquel fenómeno meteorológico y muchas empresas cerraron temporalmente. Para O’Connor la decisión fue continuar operaciones y citar a sus empleados.  

Bajo el pretexto de alcanzar la cuota, el CEO de la compañía pidió a sus trabajadores asistir a la planta en medio del huracán. Algunos sobrevivientes aseguraron haber sido amenazados con un despido en caso de no hacer caso a la solicitud. 

Pese al riesgo, las personas se presentaron por miedo a quedar desempleados, pero al poco tiempo, el panorama empeoró, y aunque muchos pidieron permiso para retirarse, éste les fue denegado. No fue sino hasta que el lugar se quedó sin luz que los gerentes autorizaron al personal irse; sin embargo, ya era muy tarde. Muchos de ellos no alcanzaron a ponerse a salvo de una inundación que arrasó rápidamente con el parque industrial de Impact Plastics. 

Como resultado de la imprudente decisión, dos colaboradores de la compañía perdieron la vida, cuatro más continúan desaparecidos, y otros cinco lograron ser rescatados. 

La respuesta del CEO que impidió que sus trabajadores escaparan del huracán 

La noticia pronto llegó a los noticieros, quienes no dudaron en dar cobertura al hecho. Fue ahí cuando comenzaron a surgir más datos de aquel trágico episodio, tales como que a pesar de que las víctimas llamaron al 911, la respuesta que obtuvieron fue que la prioridad eran los pacientes de un hospital. 

Ante los señalamientos, el CEO de Impact Plastics, Gerald O’Connor, emitió un comunicado en video en donde explica su versión de los hechos. En él asegura que los empleados tuvieron al menos 45 minutos para evacuar antes de la inundación y que no hubieron amenazas de despido. También apuntó que él fue de los últimos en abandonar la empresa y señala que nadie murió dentro de sus instalaciones. 

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A pesar de su defensa, han llovido miles de críticas, principalmente acusando que 45 minutos no fueron tiempo suficiente para ponerse a salvo. El CEO también fue juzgado por priorizar los beneficios económicos por encima del bienestar de su equipo. 

La demanda de los familiares 

Ante la tragedia en Tennessee, la familia de Johnny Peterson, uno de los fallecidos, demandó a la empresa y su CEO. El abogado asegura que hay razones para creer que esta situación pudo haber sido evitada. 

Entre las acusaciones, además del poco tiempo para evacuar, se encuentra la de no contar con un plan de acción de emergencia. Esto cobra aún más relevancia pues la empresa se ubica en una zona de riesgo por inundación designada por el gobierno federal. 

Los familiares de los desaparecidos aún exigen respuestas respecto al paradero de sus seres queridos, algunos de ellos de origen latino. 

Las lamentables pérdidas han puesto al CEO de Impact Plastics en el ojo del huracán pues se le cuestiona priorizar el beneficio económico por encima de sus trabajadores. Esta historia se une a otras tantas en donde las empresas han demostrado el poco interés en el bienestar de su gente, incluso en la vida de las personas que colaboran con ellos. 

Daniela Ramos Comunicóloga y mamá. Con 10 años de experiencia, he podido contar historias relacionadas con los negocios, finanzas personales, cultura laboral, emprendimiento y tecnología.