Lucía, una chica colombiana, padecía severos ataques de epilepsia desde la adolescencia. Aunque visitó muchos médicos y especialistas, a sus 35 años no había encontrado algo que le ayudara a tratar los síntomas debilitantes de su enfermedad.
Un día pudo viajar a Canadá, donde un especialista le recomendó una marca de aceite de cannabis medicinal que, en cuanto probó, palió significativamente sus dolencias. Sus espasmos fueron menos violentos y sus disparadores menos frecuentes. Al regresar a su país de origen, Lucía no pudo localizar el medicamento que tanto le había beneficiado. Aunque probó muchas presentaciones del cannabidiol, ninguna le dio el mismo resultado que había conseguido en Canadá.
Este caso es muy común entre los pacientes que utilizan cannabis medicinal, ya que muchas veces no encuentran el mismo medicamento que una vez los alivió, debido a que los cientos de productos que hay en el mercado no están estandarizados.
Pero Lucía y otros enfermos podrían tener pronto una esperanza. Existe una empresa que busca ser el principal productor de ingredientes y materia prima de calidad para los productos basados en cannabis: Plena Global. Se trata de una corporación canadiense que está invirtiendo en diversos países de Latinoamérica para producir plantas de mariguana que estén cuidadas en todas las etapas de su proceso para obtener cannabis de alta gama para uso médicinal.
“El mercado mundial tiene una terrible escasez de cannabis medicinal de alta calidad que cumpla con las buenas prácticas de fabricación (GMP, por sus siglas en inglés) y que alcance los más altos estándares farmacéuticos”, dice Richard Zwicky , CEO y fundador de Plena Global en entrevista.
La empresa de Zwicky es una firma B2B que cultiva cannabis medicinal en países de Sudamérica, donde su uso ya está reglamentado para su exportación a países en donde el producto tiene alta demanda como Canadá, Alemania e Italia.
Plena Global tiene una misión muy clara: generar una producción estable y estandarizada de cannabis medicinal para suministrar la materia prima a grandes empresas farmacéuticas, pequeños dispensarios y cualquier organización que cuente con los permisos adecuados de su país para manejar cannabis. Así todos tendrán la medicina que necesitan. Para entenderlo mejor: si compras una botella de aspirinas en la Ciudad de México y luego viajas a Alemania y compras otra, tienes la confianza de que el producto no sólo tendrá la misma calidad, sino que tendrá el mismo efecto. Eso es lo que esta firma canadiense quiere hacer con el cannabis medicinal.
No es algo mínimo, pues de acuerdo con la American Cancer Society , el cannabidiol ( CBD , en sus siglas en inglés), “ayuda a aliviar el dolor y las náuseas, reduce la inflamación y puede actuar como un antioxidante. Puede ser un auxiliar para tratar convulsiones, reducir la ansiedad y paranoia”.
Richard Zwicky es de ese tipo de personas que una vez que encuentran un problema lo resuelven como si fuera un rompecabezas, pero antes de colocar la última pieza ya está pensando en cuál será el siguiente acertijo que quiere resolver.
La historia de este emprendedor serial se remonta a los años 90, cuando había construido una pequeña cadena regional de tiendas en la Columbia Británica de Canadá. En 1998 Zwicky comenzó a desarrollar por cuenta propia la versión online de sus tiendas como un modelo de negocios separado al que llamó Luggageworld.
“Desarrollé un software para automatizar muchas de mis tareas diarias que eran repetitivas. Entonces pensé que muchas de las cosas que mi programa hacía para mi sitio web podrían ser útiles para promocionar otras páginas”, recuerda Zwicky.
No se equivocó. Ese software que desarrolló se convirtió en Metamend, una agencia de marketing en línea de servicio completo que hasta el día de hoy atiende a las personas que quieren mejorar el rendimiento de sus portales. Eventualmente desarrollaría Enquisite, primera plataforma de análisis de búsqueda del mundo.
De esta manera, Zwicky se convirtió en uno de los expertos más reconocidos del mundo en algoritmos de motores de búsqueda, detección de fraudes de clics, análisis y tecnologías de visualización de anuncios.
No obstante, su foco de atención se alejó de las estadísticas y los análisis de datos hace seis años. Personas muy cercanas a él empezaron a experimentar padecimientos que generaban dolores y nervios terribles, como síntomas de las primeras etapas del Parkinson y otras enfermedades que pueden ser devastadoras.
“Los vi probar productos de cannabis medicinal como cremas o aceites tópicos y similares, y vi el efecto que estos medicamentos tenían en ellos. Eso me permitió reconocer que había algo grande y desconocido sobre el cual quería aprender más”, cuenta el emprendedor.
Al ver que sus seres queridos no podían acceder a estos medicamentos con facilidad, decidió investigar y aprender sobre la industria del cannabis medicinal.
Eso fue el origen de Plena Global, una empresa que es el primer productor mundial de cannabis de grado médico del mundo. Cuenta con más de 1.2 millones de metros cuadrados cultivables y un equipo conformado por científicos, cultivadores, especialistas en extracción y líderes médicos a nivel mundial para generar suministros de cannabis medicinal de la más alta calidad. Actualmente está creciendo en múltiples ubicaciones geográficas en América del Sur y actualmente se está asociando con compañías en los sectores farmacéuticos, bienestar, alimentos y productos de consumo de marcas con sede en países como Canadá, Australia, Reino Unido, México y Alemania.
Imagen: Cortesía Plena Global
A medida que Zwicky investigaba más y más se daba cuenta de que cultivar la planta en Canadá a largo plazo no era viable, debido a su clima invernal, por lo que volteó la mirada junto con sus socios a otra zona del planeta donde se pudiera instalar una planta de extracción a más bajo costo. ¿Cuál fue esa región ideal? América Latina.
“No podemos forzar a una planta a adaptarse a un clima, pero sí podemos sembrarla en un lugar con las condiciones ideales para que crezca con menos estrés y nos dé un espectro más amplio del material que necesitamos”, dice el emprendedor al ser cuestionado sobre por qué no levantar sus invernaderos en Canadá, donde el uso medicinal del cannabis ya está reglamentado.
Richard Zwicky, quien ya tenía cierta experiencia previa con agricultura en pequeña escala, descubrió que los mejores lugares para sembrar mariguana y extraer cannabis de calidad se encontraban debajo del cinturón ecuatorial de América Latina, en específico, en Colombia y Perú.
“Mientras que naciones como Canadá pueden sembrar y cosechar una vez al año, nosotros en América Latina, por nuestra situación geográfica podemos tener hasta tres ciclos en el mismo tiempo”, asegura Guillermo Nieto, presidente de la Asociación Nacional de la Industria del Cannabis (ANICANN).
En noviembre 2017, cuando Perú firmó las leyes que regulizan el uso del cannabis para uso médico, Richard Zwicky y sus asociados estuvieron presentes en el acto oficial en Lima. Casi 18 meses después, el 23 de febrero, el gobierno de Perú publicó las regulaciones que van a dictaminar tanto la aplicación como la producción de cannabis medicinal en el país, y el equipo de Plena Global ha sido parte de este proceso.
Una vez que Plena Global reciba la licencia en Perú, espera comenzar a cultivar la planta en el país a finales de 2019. La empresa contará con expertos médicos e instalaciones de procesamiento para comenzar a distribuir productos de cannabis medicinal en hospitales y clínicas, tan pronto como lo permitan las licencias y el proceso regulatorio peruanos.
“El tener material de calidad va a ayudar a los productores, grandes y pequeños, a tener procesos más estables, rápidos y dar una respuesta mejor a sus clientes”, asegura el presidente de la ANICANN.
La estrategia para la compañía de Zwicky para entrar en América Latina, una región donde el debate por la despenalización del uso médico de la mariguana todavía es muy caliente, se ha basado en la colaboración con los aliados locales y el brindar valor a las comunidades donde opera Plena Global.
“Arrancamos operaciones en Colombia, un maravilloso país vibrante que es muy diferente a lo que la gente se imagina al ver la televisión. Para nosotros ha sido fundamental contar con el apoyo de la comunidad local para lograr nuestros objetivos. Para nosotros las comunidades donde operamos son nuestros socios”, afirma el empresario, quien asegura que busca dar beneficios a la comunidad como guarderías infantiles y servicios médicos en algunas regiones.
Para Plena Global es indispensable contar con buenas relaciones con los productores locales, ya que ellos les ayudan a entender la comunidad y la cultura de una manera en la que su equipo canadiense no podría hacerlo por sí solo.
“Nos reunimos con personas y familias peruanas muy interesantes para comprender cómo podríamos colaborar, y eso nos colocó en una posición muy fuerte en el mercado local, donde no nos verían como una compañía extranjera que recién llegaba a establecerse para simplemente tomar ganancias”, dice Zwicky. “Estamos buscando aquellos individuos que buscan crecer y producir al más alto nivel porque estamos absolutamente enfocados en el espacio médico en el espacio de bienestar.”
Plena Global se encuentra hoy estudiando otros países de América Latina para invertir, como Chile y Argentina. Busca mercado cuyo clima sea lo suficientemente bueno para cultivar y cuya estabilidad económica justifique la inversión de millones de dólares que supone una planta de extracción de cannabis.
Imagen: Cortesía Plena Global
Para la firma de Richard Zwicky , el mercado del cannabis medicinal seguirá evolucionando en todo el mundo, en especial en América Latina, porque se debe lograr que las personas tengan acceso a la medicina necesaria para sus padecimientos a un precio asequible.
“Es muy natural que estos países que están en las regiones que ofrecen las mejores condiciones de crecimiento vayan a liderar el mundo en el futuro con respecto a este comercio. El impacto económico que esta industria puede traer a la región es alucinante.”
Zwicky ve el nacimiento de la industria de el cannabis medicinal un poco similar a lo que fue el crecimiento de internet a finales de los años 90, con la ventaja de trabajar en un sector que ya está muy establecido y es fácil de reconocer por los usuarios como el de la salud.
“Hasta la prohibición del cannabis antes de la Segunda Guerra Mundial, se trataba de una medicación extremadamente común en todo el mundo. En mi oficina tengo una botella de aceite de cannabis de 1913 que se vendía en farmacias locales. Fue uno de los ingredientes médicos más comúnmente utilizados y, de la noche a la mañana, todos sus usos fueron erradicados de nuestra mente”, lamenta el emprendedor canadiense.
“Queremos encontrar a las personas que han podido mantener ese conocimiento y salvaguardar esa información para poder compartirla y no perderla más. Da miedo ver cuán fácil podríamos perder ese conocimiento en un par de años.”
Zwicky aconseja a todos aquellos emprendedores que quieran intentar suerte en la industria de el cannabis medicinal: encuentra algo que te apasione, que sea un problema real y que puedas tratar de resolver para las demás personas.
“Al final no se trata de ganar 10 millones o diez dólares, sino de lo que haces en el camino, lo que aprendes en ese proceso y cómo impactas a los demás.”
