5 claves para conseguir un empleo más rápido si duraste poco en los anteriores
Si has tenido trabajos de corta duración en el pasado tienes que estar doblemente preparado a la hora de conseguir una entrevista.
Cuando estás a punto de conseguir una entrevista de trabajo no existe un currículum que no se lea: debes darlo todo. Para la mayoría de los jefes de contratación, la primera impresión que dejas es a menudo la última.
Y en la actualidad ese enfoque a veces brutal y despiadado significa que hay que esforzarse más que nunca para destacar entre la multitud y demostrar que mereces algo más que una segunda mirada.
Con tantos solicitantes de empleo compitiendo por los mismos puestos, los reclutadores ven cada vez más a los candidatos a través de una lente muy estrecha: ¿Demuestran entusiasmo y compromiso? ¿Tienen alguna bandera roja en su CV formal y en sus redes sociales? ¿Son fiables? Y quizás lo más importante: ¿Son una apuesta segura para un periodo de tiempo prolongado?
Aunque suene a miedo, esto significa que, si has tenido trabajos de corta duración en el pasado por cualquier motivo, tienes que estar doblemente preparado a la hora de conseguir una entrevista.
Así que sigue leyendo para conocer 5 claves que aumentarán tus posibilidades de aterrizar si tus anteriores trabajos duraron apenas unas semanas o meses:
1. Asegúrate de que tu currículum sea impecable
Tu currículum es esencialmente la primera impresión que dejas en la persona responsable de contratación, así que tiene que ser excelente.
Si has estado desempleado, o años de licencia por algún motivo, eres autónomo o has trabajado en un empleo que no está relacionado con el puesto que buscas, tendrás que poner un cuidado especial en el diseño y el lenguaje de tu currículum y futuras convocatorias.
Hoy, la primera entrevista la hacen en tus redes sociales, donde se puede observar cómo escribes, opinas, interactúas, y de qué forma muestras tu conocimiento y competencias profesionales. Nos guste o no, es así.
Los datos indican que los jefes de contratación dedican una media de 6 segundos a mirar un currículum. Y por si fuera poco, ¿Sabías que la mayoría de los jefes de contratación sólo miran las tres primeras frases? Si has tenido trabajos de corta duración, tu currículum debe centrarse en los logros y desafíos esenciales de esos puestos en esos renglones iniciales.
2. Actualiza tus formas de presentarte a tu entrevista de trabajo
Que el mundo cambió no es ninguna novedad, y la forma de entrevistar, también. Hoy no alcanza con llegar a tiempo y vestirte lo mejor posible, sino que se requiere muy buena preparación previa.
Lo básico que se pide es, por ejemplo, que tengas información detallada sobre la empresa, sus cuadros gerenciales, a qué se dedican y sus noticias más recientes. Parece abrumador, lo sé; aunque encontrarás toda esta información simplemente navegando en Internet.
Cuando se trata de entrevistas de trabajo es importante asegurarse de mantener normas de educación y respeto durante todo el proceso, aunque no en forma sumisa, ya que así darías la impresión de no tener confianza en ti.
Tendrás más posibilidades de superar la entrevista si puedes demostrar a la persona de recursos humanos que tienes las habilidades y la experiencia necesarias para el puesto, además de encajar en la cultura de la empresa, de la que ya habrás averiguado en Internet o con conocidos, y también, al observar diez minutos antes, mientras esperas en la recepción: créeme, es un muy buen lugar para ver las interacciones, percibir el clima y saber dónde te estás metiendo.
Además, si has tenido trabajos de poca duración, puedes aprovechar la entrevista para explicar por qué has trabajado para varios empleadores, y, fundamentalmente, cómo entraste, por qué saliste, y qué has aprendido de cada puesto. También te recomiendo que refuerces cuál fue tu aporte positivo para la empresa.
3. Demuestra que aprendes rápido
Es importante recordar que cualquier ejecutivo de contrataciones que vea un currículum con alta rotación laboral tiene una serie de preocupaciones, que son diferentes a las de uno que contrata a alguien con experiencia de larga duración.
Aquí tienes un consejo de oro para manejar mejor estos casos: cuando solicites un empleo haz hincapié en que aprendes rápido y que eres capaz de adaptarte a diferentes situaciones.
Demostrando que aprendes rápido, puedes indicar a la empresa que capitalizas experiencia a partir de tus errores y que no tienes miedo de asumir la responsabilidad por tus acciones. Lo mejor en estos casos es poner un ejemplo concreto: qué pasó, cómo lo resolviste y cuáles fueron los resultados específicos para la parte empleadora.
4. Demuestra que sabes apreciar el trabajo y que eres leal
Una de las mayores banderas rojas para quienes contratan personas con poco tiempo en los trabajos anteriores, es la sospecha de que puedes ser alguien inestable, o que tal vez renunciarías de un momento a otro.
Sin entrar en detalles de que no tienes por qué aguantar empresas tóxicas, que las hay, -al igual que empleados tóxicos y buscapleitos-, en estas entrevistas se evaluará tu lealtad y tu marcada intención de permanencia. Por empezar, jamás hables mal de tus anteriores empleos ni jefes.
Es fundamental que cuides la forma en que expreses que quieres un empleo con continuidad; incluso si te ofrecen tres meses iniciales de prueba. Conozco muchos casos que empezaron con un período preestablecido, y han hecho una carrera de años.
Para tener máxima efectividad recomiendo que expliques tus motivaciones, tu conocimiento de la cultura de la empresa, lo que te ha llamado la atención de ese rubro en particular, y la voluntad de integrarte a equipos que puedan lograr resultados. Es decir que demostrarás así tu apuesta a un empleo donde puedas desplegar tus conocimientos y adaptabilidad pensando en quedarte.
Si entras a trabajar, debes esforzarte al máximo para alcanzar y superar los objetivos, para ratificar con hechos lo expresado en la entrevista.
5. Demuestra que eres fiable, aunque sea por poco tiempo
¿Cómo puedes demostrar que eres un empleado de confianza? La mejor manera de hacerlo es prepararse para la entrevista y tener ejemplos de momentos en los que has sido fiable en el pasado.
Cualquier entrevista debe ser diseñada de antemano, por lo que no recomiendo que vayas en frío y sin haber segmentado bien tu currículum según el tipo de puestos e industrias a los que te postulas. No sirven currículums estándar disparados a granel y sin estrategia.
Piensa en momentos en los que hayas sido implacable en tus esfuerzos, o en los que hayas demostrado que eres una persona emprendedora que consigue hacer el trabajo. De hecho, el rol de “intra-emprendedores” es uno de los más buscados en este momento.
Otro aspecto central es que dejes en claro que dominas las habilidades blandas y que te gusta trabajar en equipo. Por ejemplo, la capacidad de exponer tus ideas, preparar informes, redactar correctamente, saber vender interna y externamente, tener empatía y automotivación, son rasgos que hoy se evalúan en forma minuciosa.
Recuerda: actualmente, el cincuenta por ciento de lo que buscan las empresas es la formación técnica y un título, y el otro cincuenta, estas competencias blandas.
Un tip final que no puede faltar
Asimismo, te recomiendo que mantengas al día tu perfil de LinkedIn, la red social profesional con más de 850 millones de usuarios en todo el mundo.
Si no lo tienes, abre uno; la versión gratuita tiene todo lo básico que necesitas para que los futuros empleadores te encuentren y vean tus antecedentes -que deberán ser idénticos a los que tienes en el Currículum que enviaste-, e incluso, que compartas contenido que deje entrever tu interés por tu actividad o profesión. También puedes pedir a colegas y personas a las que reportaste que escriban una breve recomendación sobre tu desempeño, lo que sumaría avales a esta otra forma de currículum laboral.
Por eso, si has tenido trabajos de corta duración, no dejes que eso sea un motivo de preocupación a la hora de conseguir un nuevo puesto. Más bien, utilízalo como motivación para demostrar tu valía y asegúrate de tener una estrategia bien definida antes de tu próxima entrevista de trabajo.