Son tiempos complejos para los medios de comunicación. Vice Media, que alguna vez fuera una de las marcas más populares por sus reportajes a fondo y provocativos, se declaró en bancarrota el lunes temprano.
La empresa pidió la protección del Capítulo 11 de las leyes mercantiles en Estados Unidos para así poder conseguir que un grupo de prestamistas compre sus activos en 225 millones de dólares. Se estima que Vice tiene pasivos (o deudas) que rondan los 500 a mil millones de dólares.
“Este proceso acelerado de venta supervisado por un tribunal fortalecerá a la Compañía y posicionará a VICE para un crecimiento a largo plazo”, escribieron en un comunicado los codirectores ejecutivos Bruce Dixon y Hozefa Lokhandwala.
Según reporta CNN, Fortress Investment Group y Soros Fund Management le prestaron ya 20 millones de dólares a Vice para mantenerla a flote mientras consigue un comprador.
Vice Media es una empresa de medios de comunicación y entretenimiento fundada en 1994 por Shane Smith, Suroosh Alvi y Gavin McInnes. La compañía comenzó como una revista alternativa en Montreal, Canadá, conocida como Voice of Montreal. En 1996, el nombre de la revista se cambió a Vice y desde entonces ha experimentado un crecimiento significativo.
Con el tiempo, la compañía se expandió y diversificó su contenido, abarcando una amplia gama de temas como noticias, cultura, música, moda y más. Además, Vice tenía alcance globalmente, estableciendo oficinas en todo el mundo, incluyendo Estados Unidos, Reino Unido, Canadá, Australia y más.
Vice Media se caracterizaba por su estilo audaz, irreverente y vanguardista, atrayendo a una audiencia joven y ávida de contenido alternativo. A lo largo de los años, la empresa enfrentó desafíos y críticas, pero había logrado mantener su relevancia y crecimiento al adaptarse a las nuevas tendencias y tecnologías.
En 2017, el valor de la empresa era de 5,700 millones de dólares. Sin embargo, el cambio en los patrones de consumo ha reducido fuertemente la inversión en publicidad digital.
