Después de que ayer el presidente de México declaró que, si Grupo México se desistía de seguir en las negociaciones para vender Banamex, el gobierno federal buscaría la opción de comprar la institución mediante una posible Asociación Público Privada (APP).
Esta mañana Citigroup anunció que llevará a cabo una Oferta Pública Inicial (OPI) de sus negocios de Banca de Consumo y Banca Empresarial en México, con lo que continuará adelante en la separación ya planeada de su negocio institucional, mismo que se mantendrá como parte de Citi.
Previamente, Citigroup había anunciado un proceso dual para su salida del negocio bancario de consumo en México, lo que incluía una posible Oferta Pública Inicial (OPI), con el compromiso de ofrecer el máximo valor a sus accionistas.
Citigroup mantendrá la marca Banco Nacional de México (Banamex) y seguirá siendo uno de los grupos financieros líderes en México, explicó el corporativo esta mañana en un comunicado.
De esta manera, Banamex continuará ofreciendo su gama de servicios financieros para los segmentos de Banca de Consumo y Banca Empresarial, con una amplia red de distribución de 1 mil 300 sucursales, 9 mil ATMs, 12.7 millones de clientes de la Banca de Consumo, 6 mil 600 clientes de la Banca Empresarial y 10 millones de clientes en su Afore.
La directora global de Citigroup, Jane Fraser, dijo que después de un cuidadoso análisis, se concluyó que el camino óptimo para maximizar el valor de Banamex para los accionistas y avanzar en su objetivo estratégico de simplificar la firma es moverse en el camino dual, para enfocarse solamente en una OPI del Negocio.
“Citi ha operado por más de un siglo en México y continuaremos invirtiendo y haciendo crecer nuestra franquicia institucional, líder en la industria, en este país tan importante para nosotros, ofreciendo así todo el potencial de la red global de Citi a nuestros clientes institucionales y del Citi Private Bank en este mercado prioritario”, dijo la directiva.
La medida se toma después de intensas horas llenas de especulaciones y comentarios en el sentido de que Germán Larrea, dueño y presidente de Grupo México, se retiraría de las negociaciones para adquirir la institución por un monto de hasta 7,500 millones de dólares, después de que el viernes fueran ocupadas por el gobierno instalaciones ferroviarias de su filial Ferrosur.
Además, ante dichas especulaciones el martes por la mañana el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador señaló que, si Larrea no comparaba Banamex, el gobierno federal podría adquirir la institución.
Con el anuncio de Citigroup, ante la negativa del gobierno mexicano de otorgar autorización a un posible comprador global que no sea de origen mexicano, ante la escasez de compradores mexicanos y la serie de conflictos que envuelven en este momento a quien podría comprar el banco, Citigroup da un golpe en la mesa, les dice no a todos y acudirá a la única opción que le quedó, la OPI.
Por Antonio Sandoval
