



Michael Burry, el inversionista que saltó a la fama por anticipar la crisis de 2008 y cuya historia inspiró la película La Gran Apuesta, vuelve a sacudir los mercados. En un giro inesperado, Burry ha reducido drásticamente su portafolio, apostando en contra de casi todas sus inversiones, especialmente en el sector tecnológico, y manteniendo solo una posición a largo plazo: Estée Lauder, la icónica firma de belleza de lujo.
Esta decisión, revelada en documentos oficiales ante la SEC, ha encendido las alarmas entre inversores y analistas de todo el mundo, quienes siguen de cerca cada movimiento del fundador de Scion Asset Management.
La estrategia de Burry no solo sorprende por su pesimismo hacia gigantes como Nvidia, Alibaba y Baidu, sino también por el aumento de su inversión en Estée Lauder, en un contexto donde la volatilidad y la incertidumbre dominan los mercados globales.
Para emprendedores, empresarios y dueños de negocios en México y Latinoamérica, entender el razonamiento detrás de estas jugadas puede ofrecer valiosas lecciones sobre cómo navegar tiempos de crisis e incertidumbre.
¿Qué señales está enviando Burry al mercado? ¿Es momento de repensar las apuestas tecnológicas y mirar hacia sectores menos convencionales? Analicemos los detalles clave de esta jugada maestra.
El movimiento de Michael Burry ha encendido alertas: lanzó posiciones de venta (PUT) sobre gigantes tecnológicos estadounidenses y chinos como Nvidia, Alibaba, Baidu, JD.com y PDD Holdings. Esta estrategia revela su escepticismo ante la fortaleza del sector tecnológico, que en los últimos años ha impulsado los mercados, pero que ahora enfrenta nubarrones.
Burry, a través de su firma Scion Asset Management, redujo su portafolio a solo 7 posiciones de las 13 anteriores. Sin embargo, el valor total de su cartera aumentó de 77.4 millones de dólares a 199,200 mdd, según reporta The Week.
Las empresas que abandonaron la cartera fueron Molina Healthcare, HCA Healthcare, Oscar Health, Bruker Corp, V.F. Corp, Canada Goose, American Coastal Insurance y Magnera Corp.
La cartera de Burry del primer trimestre es la más concentrada de su historia y podría considerarse una de las posturas más bajistas en la historia reciente del mercado. El historial de Burry en la identificación de posibles burbujas de mercado apunta a un problema mayor que plantea la pregunta: ¿están sobrevalorados los sectores tecnológicos de EE. UU. y China?
Burry no solo deja ver que desconfía del crecimiento de la inteligencia artificial, también anticipa una posible corrección en el mercado estadounidense y chino. Factores como la desaceleración del consumo, la guerra comercial entre Estados Unidos y China, y el aumento de aranceles, han minado la confianza en empresas tecnológicas. Incluso resultados recientes, como la caída del 15% en las acciones de PDD tras reportar menores ingresos, refuerzan el argumento bajista.
Para los empresarios y emprendedores, este mensaje es claro: la tecnología ya no es una apuesta segura. La volatilidad, la competencia feroz y el entorno regulatorio pueden cambiar el panorama en cuestión de meses. Diversificar y estar atentos a señales macroeconómicas es más importante que nunca.
En medio de este pesimismo, destaca la única apuesta a largo plazo de Burry: Estée Lauder. No solo la mantuvo en cartera, sino que duplicó su participación, convirtiendo al sector de belleza de lujo en su refugio. Burry duplicó su apuesta hasta las 200,000 acciones, valoradas en $13,200 millones de dólares.
¿Por qué elegir una firma de cosméticos cuando todo parece incierto?
La respuesta está en el llamado “índice del lápiz labial”: en tiempos de crisis, los consumidores tienden a buscar pequeños lujos asequibles, como cosméticos, para sobrellevar la incertidumbre. Mientras otros sectores sufren, la belleza de lujo resiste e incluso crece. Burry apuesta a que, aunque los bolsillos se aprieten, el deseo de bienestar y autoestima seguirá impulsando las ventas de Estée Lauder.
Para los negocios y startups, esta lección es valiosa: identificar productos o servicios que se mantengan relevantes y deseados, incluso en ciclos económicos adversos, puede ser la clave para sobrevivir y prosperar.
La drástica reducción de la cartera de Burry, de 13 a solo 7 posiciones, y su concentración en apuestas bajistas, envían un mensaje de cautela. El aumento del valor total de su portafolio, pese a la reducción de activos, muestra una estrategia de alta convicción y riesgo calculado.
Burry invita a cuestionar el optimismo ciego hacia la tecnología y a mirar más allá de las tendencias del momento. Analizar el contexto macroeconómico, anticipar cambios regulatorios y buscar refugio en sectores resilientes son acciones que pueden marcar la diferencia. Además, su historial demuestra que ir contra la corriente, cuando se fundamenta en datos sólidos, puede generar grandes oportunidades.
Para los líderes de negocios en México y Latinoamérica, el consejo es claro: no temer a ajustar estrategias, diversificar y prepararse para escenarios adversos. La agilidad y la visión a largo plazo serán sus mejores aliados.
Michael Burry vuelve a desafiar al mercado con una jugada audaz. Su apuesta por Estée Lauder y su escepticismo hacia la tecnología son señales que invitan a la reflexión. En tiempos de incertidumbre, la clave está en anticipar, diversificar y nunca dejar de cuestionar las tendencias dominantes.