
Un intenso frente frío junto con una masa de aire polar y un fuerte evento de “Norte” traerán este jueves una oleada de frío en más de veinte estados de la República Mexicana, con temperaturas mínimas que podrían descender entre -5 °C y 5 °C, rachas de viento que alcanzarán los 75 a 90 km/h y lluvias fuertes en el oriente y sureste del país. Las autoridades meteorológicas advierten que este sistema —catalogado como Frente Frío #11— impactará desde la sierra hasta zonas costeras y determinará condiciones de frío extremo o muy frío en regiones donde habitualmente no se prepara para ello.
De acuerdo con informes del Servicio Meteorológico Nacional (SMN), el avance del Frente Frío #11 estará acompañado por una masa de aire polar que se extenderá sobre el noroeste, norte y centro del país, provocando un descenso notable de las temperaturas, heladas en zonas altas y condiciones de frío persistente durante la madrugada del jueves.
Este fenómeno se agrava porque la masa fría mantiene su intensidad y su extensión hacia regiones donde el termómetro raramente baja de los 0 °C, lo que hace que los efectos sean más sentidos en población no acostumbrada al frío extremo.
Para este jueves se prevén temperaturas mínimas de -5 a 0 °C en zonas serranas de estados como Chihuahua, Durango, Zacatecas, Estado de México, Puebla y Tlaxcala. Mientras tanto, de 0 a 5 °C se registrarán en regiones montañosas de Nuevo León, Tamaulipas, San Luis Potosí, Aguascalientes, Jalisco, Michoacán, Guanajuato, Querétaro, Hidalgo, Veracruz y Oaxaca.
La alerta incluye también la Ciudad de México y su zona conurbada, donde se espera ambiente muy frío a partir de la madrugada, especialmente en zonas altas como el Ajusco o el oriente.
El SMN y la Comisión Nacional del Agua (Conagua) también advierten que este sistema traerá lluvias fuertes (5 a 25 mm) o puntuales muy fuertes (25 a 50 mm) en el oriente y sureste, especialmente en Veracruz, Oaxaca, Tabasco y Chiapas.
Además, el “evento de Norte” —vientos del norte que soplan intensamente sobre costas del Golfo e Istmo de Tehuantepec— podría alcanzar rachas de 75 a 90 km/h en las costas de Veracruz y Oaxaca, y de 65 a 80 km/h en zonas de Chiapas, lo que incrementa el riesgo de oleaje elevado y tolvaneras.
Este conjunto: baja térmica + viento + lluvia, se traduce en un fenómeno de impacto múltiple que se debe atender con anticipación.
Ante esta alerta, las autoridades sugieren algunas medidas para minimizar el riesgo:
El frío severo y los vientos pueden afectar servicios básicos, como suministro eléctrico, transporte, y la seguridad vial en carreteras de montaña, donde la combinación de heladas y viento puede generar nieve, hielo o tolvaneras. Las zonas costeras sujetas al “Norte” deben prepararse para oleaje alto (3–4 metros) y posibles corrientes peligrosas, lo que hace clave evitar actividades acuáticas.
También se recomienda a gobiernos locales activar albergues temporales, garantizar atención a personas en situación de calle y coordinar brigadas de emergencia en zonas de montaña o con acceso limitado.
El pronóstico advierte que más de veinte estados vivirán un episodio de frío intenso, viento fuerte y lluvia que puede afectar de forma significativa la vida diaria, especialmente en regiones no acostumbradas a temperaturas bajo cero. Esta nota es crucial porque invita a la acción preventiva, a estar informado y a tomar en serio un evento climático que, aunque ya esperado en temporada, puede desencadenar consecuencias severas si se subestima.

