No importa a qué te dediques, emprender es para todos, aunque tu negocio de medio tiempo no tenga nada que ver con tu ‘trabajo real’. Tal es el caso de una tiktoker, quien se hizo viral al explicar cómo se fue de viaje a Europa con el dinero que gana vendiendo ropa de Chiconcuac.
El mercado de Chiconcuac y su respectivo tianguis se ubican en la zona noroeste del Estado de México. Es un lugar famoso entre los comerciantes porque ahí pueden conseguir ropa, cobijas y accesorios de excelente calidad a buen precio, especialmente de invierno. Por ejemplo, encuentras chamarras desde $150 pesos y hasta menos, según recoge Chilango.com.
Tales son las ganancias que se pueden obtener con estos productos, que a una usuaria de TikTok le alcanzó para recorrer el viejo continente.
Una maestra, identificada como Sandra Baez (@sandybaez20), relató cómo logró viajar a Francia, España, Italia, Turquía y otros lugares con el dinero que le deja revender online las prendas que compra en Chiconcuac.
Como buena historia viral, todo comenzó con un post. Baez compartió en la red social china un breve clip con la leyenda:
“Unos días caminando en París, otros en Chiconcuac pa’ pagar los viajes”, escribió, agregando el hashtag #MomentosQueMeMantienenHumilde
@sandybaez20 Cosas que me mantienen humilde #humildemente#funnyvideos#walking ♬ original sound – Roberto Campos
Los países europeos están entre los más caros del mundo para ser turista. De hecho, datos publicados por The Economist Intelligence Unit, en su Índice de Costo de Vida Mundial (Worldwide Cost of Living) 2021, revelan que París es la segunda ciudad más cara para vivir.
Sin embargo, casos como el de Sandra demuestran que no es imposible visitarlos si tienes iniciativa y un buen plan para obtener ingresos extra. Para ella y muchos comerciantes, comprar ropa con ‘las tres B’ (buena, bonita y barata) y venderla en línea es un gran negocio, pues las ganancias dependen de tu esfuerzo y el precio que le pongas al producto.
Por otro lado, tras consultar las agencias de viajes online Despegar.com y BestDay.com, encontramos que puedes pasar una semana en París (8 días, 6 noches) por menos de 22,000 pesos mexicanos.
El precio incluye vuelo redondo CDMX-París y hospedaje en un hotel modesto (pero parisino, a fin de cuentas). A eso debes sumar la comida, transportes locales, entradas a atracciones turísticas y las compras extra.
¿Te suena imposible? A ella no, ¡y lo hizo!
Hasta el momento, el video cuenta con más de 526 mil reproducciones y supera los 42 mil likes. Entre los más de 400 comentarios hay todo tipo de reacciones. La gran mayoría la felicita por cumplir su sueño a base de esfuerzo, iniciativa y espíritu emprendedor, pues su historia resultó una fuente de inspiración.
“Ya fui a Chiconcuac, solo me falta París”, “Eres pura inspiración”, “Qué chingonería de mujer”, “Qué felicidad ese logro, bien merecido”, “Me inspiras, yo quiero ir a Egipto”, “Qué bien, sigue trabajando para viajar más”, son algunos mensajes que se leen en el post.
Otros usuarios destacaron los contrastes que refleja el video:
“Unos días croissant, otros tortita de tamal”, “Todo terreno, la humildad ante todo y el que sigue”, “La gente siempre habla y crítica el lujo, pero no ven que a veces toda la semana son frijoles para poder andar así”, le escribieron a la vendedora
Varios más le pidieron tips de finanzas para generar ingresos extra y alcanzar sus metas, y surgió la gran pregunta: ¿Cómo lo hizo?
En otro clip, la tiktoker muestra todos los países que visitó durante la primera mitad de 2022. Además de la capital francesa, se puede ver que estuvo en ciudades como Estambul, Madrid, Barcelona, Roma y Venecia, entre otras.
Ante el asombro de los internautas, Sandy detalló su estrategia para ganar dinero en su tiempo libre. En una serie de videos titulados ‘¿Cómo Chiconcuac pagó mi viaje a Europa?’, Baez explica que ella no es vendedora, tianguista ni trabaja de fijo en el Mercado de Chiconcuac, sino que es maestra.
“Sí me dedico a la venta de ropa. No lo hago de mayoreo, como las personas que se encuentran ahí en Chiconcuac. Yo no me dedico a eso. Yo vendo ropa, pero de menudeo, la mayoría del tiempo me dedico a la docencia“, relató en el primer clip.
En realidad, su actividad la colocaría en la categoría de ‘neni’: mujeres emprendedoras que venden productos online y los entregan de forma presencial o por paquetería.
“En mi caso, esta idea de vender ropa en línea o venderle a personas que conozco, surgió mucho antes de la pandemia, pero durante la pandemia ayudó mucho. Ustedes saben que las ventas en línea se despegaron muchísimo y ayudó a crecer los negocios”, comentó Baez.
La tiktoker dice que “esto de la venta de ropa es un adicional, al cual le estoy muy agradecida”, pues le ha enseñado bastante. “Me ha ayudado a conocer a muchísimas personas, a desenvolverme de una manera muy diferente y a darme cuenta de que hay otras cosas que me gustan, que soy capaz de hacer, y que yo no imaginaba”, afirma.
“Mi fuerte es la docencia, pero (quiero) recalcar algo muy importante. Independientemente de la profesión, o de la carrera universitaria que tengas, los invito a tener otra entrada de dinero”, señaló en un segundo clip.
Entre sus razones para emprender citó la inseguridad laboral.
“No podemos casarnos con un trabajo que no sabemos si mañana va a resultar. Lo vimos en pandemia, ¿cuántas personas perdieron su trabajo? ¿Cuántas empresas quebraron?”.
Para ella, iniciar en el ecommerce fue “una inversión riesgosa, por la situación”. Además, confirmó que tener un negocio de medio tiempo puede ser muy difícil y cansado, pero “vale la pena”.
Sandy cuenta que debe hacer muchos sacrificios para ir a surtirse en Chiconcuac, ubicado a una hora de la Ciudad de México en auto. Dice que a veces tiene que “ir corriendo” para enviar los pedidos a tiempo, se queda despierta hasta la madrugada y al día siguiente debe seguir en su empleo de maestra.
“No tengan miedo. Inviertan, aunque sea poco. Yo empecé con 300 pesos y mi mamá me animó a hacerlo. Hay que investigar cómo se manejan las redes sociales, cómo mandar paquetes, cómo generar una imagen… Me ha servido mucho tomar cursos, independientemente de lo que yo trabajo. Esto es preparate, es arriesgarte, perder ese miedo, esa pena, perderle el miedo a ofrecer (tus productos)”, concluyó.
