Las 8 poderosas lecciones de liderazgo de Barbie, la película

No cabe duda de que la nueva película de Barbie toca varios temas que son muy necesarios. Este filme te deja pensando sobre los paradigmas que se han roto a lo largo del tiempo, sobre todo en el poder que tenemos las mujeres para conseguir todos nuestros propósitos en un mundo que, definitivamente, no es rosa. 

¿Cuántas veces nos han vendido la idea de que tenemos que ser perfectas en todo lo que hacemos? En numerosas ocasiones, nos han inculcado la creencia de que debemos ser impecables en cada acción que emprendemos. Asimismo, hemos caído en la trampa de tener una concepción distorsionada del éxito en la vida. Sin duda, esto ha sucedido más de una vez. En esta ocasión, revelamos los significativos mensajes que la historia de Greta Gerwig buscó transmitirnos en una de las películas más esperadas del año.

Barbie nos sirve como enseñanza para muchas experiencias que hemos pasado por la vida. Estas lecciones se pueden aplicar en muchas cosas, como por ejemplo, en el proceso de emprender. A continuación, te decimos 8 poderosos aprendizajes que dejó la película de Barbie, aunque te advierto que estos mensajes que te contaremos en las siguientes líneas vienen con ALERTA SPOILER.

8 poderosas lecciones de liderazgo de Barbie, la película

1. El liderazgo es un don

Desde el inicio se puede percibir que la icónica “Barbie estereotípica”, protagonizada por la actriz Margot Robbie tiene un liderazgo bastante marcado. Siempre trata de llevar las riendas y hacerlo de una forma divertida.

La manera en que un líder se comporta y su actitud tienen un impacto significativo en la cultura organizacional y el ambiente laboral. Cuando el líder enfrenta sus miedos y desafíos con una perspectiva optimista y una firme determinación, crea un entorno de trabajo más positivo y motivador para su equipo.

2. Trabajo en equipo

Reconocer el esfuerzo, talento y trabajo de los demás es fundamental para siempre llevar una convivencia sana. El personaje principal de Barbie solía tener ideas, sin embargo, siempre le daba crédito a sus compañeras. 

El trabajo en equipo en un emprendimiento es importante. Nos ayuda a aprovechar nuestras fortalezas juntos, ser más creativos, delegar tareas, enfrentar los desafíos con más fuerza y lograr el éxito de forma más efectiva. Un buen equipo realmente marca la diferencia.

3. Amor propio y aceptación 

Tal y como lo expresa el slogan que todos conocemos “Sé lo que quieras ser”, la película nos indica que debemos reconocernos lo suficientemente valiosos para lograr aquello que queremos ser en la vida. Sin embargo, también es válido encontrarnos en una etapa donde no estemos completamente seguros de quienes somos y a donde vamos, pero es preciso estar dispuestos a tomarnos el tiempo para descubrirlo, porque ya estamos completos tal y como somos. 

Desde un inicio del filme, las niñas jugaban con muñecos a ser madres y cuidar de ellos, hasta que llega una versión gigante de Barbie, haciendo referencia a una de las escenas de 2001, Odisea en el espacio, y las niñas descubren que gracias a este personaje pueden ser lo que quieran, que las mujeres son capaces de ejercer cualquier profesión que ellas deseen.

En este sentido, confiar en ti mismo, en tus proyectos y emprendimientos hará que los demás igual crean en lo que haces. Proyectar seguridad ayudará a que puedas lograr hasta lo inimaginable. La confianza en tu emprendimiento y el amor propio se nutren mutuamente. Si te sientes bien contigo mismo, estarás más dispuesto a tomar riesgos, enfrentar desafíos y trabajar arduamente para hacer crecer tu negocio. La actitud hacia ti mismo y tu proyecto son cruciales.

4. Ser diferente es una virtud

A pesar de que la carismática “Barbie Rara” generó demasiadas risas en la sala del cine, en realidad fue un personaje clave para que la “Barbie estereotípica” llegara a su desenlace. En un principio la gente le tenía temor a la muñeca extravagante e incluso escepticismo por ser distinta a las demás, pero ella contaba con el don de fungir como guía para que pudiera superar la crisis existencial que estaba experimentando la otra Barbie. 

En el lado empresarial, tener ese factor diferenciador hará que destaques de tu competencia. El producto o servicio que ofrezcas debe tener algo especial, único y auténtico que lo haga resaltar. Así que piensa ¿qué más le puedes aportar al mundo que no haya visto jamás? ¿qué hará que prefieran tu producto antes que otros? ¿cómo lo harás memorable y no uno más en el mercado?

5. Como Barbie, sal de tu zona de confort

Esto sucede cuándo Barbie decide dejar su cómoda vida en “Barbieland” para aventurarse a lo desconocido. Sacó la valentía para buscar aquello que necesitaba, “a la niña que jugaba con ella”. Esto se traduce a que muchas veces por miedo a lo que no conocemos o a fracasar, preferimos quedarnos en nuestra zona segura, sin embargo, es bueno ver otras oportunidades o alternativas que la vida nos ofrece, solamente así será posible encontrar nuestro propósito. 

Salir de la zona de confort en un negocio puede ser un desafío, pero también puede conducir a oportunidades de crecimiento y éxito. No olvides que salir de la zona de confort no significa asumir riesgos irresponsables, sino más bien tomar decisiones estratégicas y valientes que puedan impulsar el crecimiento y desarrollo de tu negocio.

6. ¿Te caíste? ¡Levántate!

Cuando el personaje de Margot Robbie se “descompone”, ella comienza a experimentar por primera vez una serie de emociones complicadas que van más allá de la felicidad pura y constante que tenía presente en “Barbieland”. Cuando inicia su aventura por descubrir aquello desconocido, pasa por un remolino de emociones como: miedo, nostalgia, preocupación, enojo, angustia y tristeza, entre otras.

Sentir emociones es de humanos. Es obvio que cuando las cosas no nos salen bien, debemos desahogarnos y eso está bien, cada proceso es complicado y es preciso entender que expresar nuestros sentimientos ayuda a no reprimirlos. Sin embargo, hay que evitar estancarnos en lo mismo una y otra vez. 

Esto sucede cuando Ken se adueñó de la casa de Barbie, ella en ese momento siente una gran rabia de que dicho personaje la traicionara de esa forma, por lo que lo único que hace es tirarse a llorar. Sin embargo, sus amigas que provienen del mundo exterior, de la vida real, le recuerdan que los problemas no se solucionan simplemente llorando, sino que hay que levantarse, afrontarlos con la mejor actitud posible y tomar acciones. 

7. Dile adiós al síndrome de la impostora 

¿Cuántas veces has logrado algo y no te sientes merecedora de eso? Esto lo dejó más que claro la película cuando Barbie y sus amigas intentan desprogramar a las otras Barbie recordándoles cada uno de sus logros, sin embargo, su primera reacción es dudar si realmente lo consiguió y si se lo merece, lo cual es ese instante generó incomodidad. Esto hace referencia al famoso síndrome de la impostora. Recuerda que solamente tú sabes aquello que te costó trabajo y esfuerzo lograr, debes entender que no fue simplemente suerte haberlo conseguido, por ende, no le debes explicaciones a nadie, solamente reconocimiento a ti misma. 

No olvides que debes reconocer tus éxitos, aceptar que nadie es perfecto y el fracaso es normal y de este mismo se aprende, buscar apoyo si sientes inseguridad de algo, desafiar tus pensamientos negativos, festejar con orgullo tus logros y cada paso que das y aprender de otros emprendedores. 

8. Sé empático 

La humildad de aceptar los errores y reconocer los sentimientos de los demás es importante para trascender. Esto pasa cuando Barbie acepta que hirió a Ken al inicio, cuando este personaje mostraba interés y atención en ella, pero lo alejaba. Por el contrario, ahora ella trata de impulsarlo a ser él mismo y a descubrir para qué es bueno, porque eso haría que sacara su máximo potencial, buscando siempre su propia esencia e individualidad para sentirse autorrealizado.

En el mundo organizacional, la empatía desempeña un rol fundamental en el desarrollo de relaciones laborales sólidas y efectivas. Esto quiere decir que debes contar con la capacidad de comprender y, dentro de lo posible, intentar ponerte en el lugar de los demás, reconociendo sus emociones, pensamientos y necesidades. Siempre es bueno mantener la mente abierta, escuchar y aprender de los errores. 

Paola Pérez Sirvent