La compañía fabricante de las figuras coleccionables Funko Pop! atraviesa la mayor crisis en su historia. En su reciente informe de resultados, la compañía reportó significativas pérdidas, por lo que decidieron tomar medidas drásticas y polémicas. Para ahorrar costos, despedirán al 10% de su plantilla laboral y destruirán buena parte de su inventario, según anunció la empresa en un comunicado.
Funko es una de las firmas más sólidas en la producción de figuras de colección. Esos muñequitos cabezones de cuerpo pequeño, inspirados en personajes de películas, series, videojuegos, cómics, anime y más, parecen estar por todas partes. Especialmente en las repisas de muchos millennials, la generación que los convirtió en un producto casi de culto.
Sin embargo, los números cuentan otra historia, reporta el medio Kotaku. El fundador y CEO de Funko Inc, Brian Mariotti, reveló la situación y los planes de la compañía durante la llamada de ganancias del año fiscal 2022, que culminó el pasado 31 de diciembre,
Además del despido masivo del 10% de los empleados, Funko Pop destruirá millones de figuras con un valor de 30 a 36 millones de dólares. Es decir, tirarán a la basura entre 540 y 647 millones de pesos al tipo de cambio actual de 18 pesos por dólar (un precio histórico, por cierto).
Según explicó Mariotti, quien se convirtió en CEO de su empresa en diciembre pasado, la crisis se debe a una combinación de bajas ventas y una caída en sus acciones, que los llevó a “alcanzar un punto de inflexión”.
La compañía confirmó que su inventario total al cierre de 2022 fue de 246.4 millones de dólares, un aumento del 48% respecto al año anterior.
“Esto incluye el inventario que la compañía tiene la intención de eliminar en la primera mitad de 2023 para reducir los costos de cumplimiento al administrar los niveles de inventario para alinearlos con la capacidad operativa de nuestro centro de distribución. Se espera que esto resulte en una amortización en la primera mitad de 2023 de aproximadamente 30 a 36 millones“, se lee en el informe.
En palabras simples, antes de julio Funko mandará al vertedero los muñecos sobrantes para ahorrarse los costos de almacenamiento.
Mariotti detalló que, por una baja en las ventas, se acumularon demasiadas piezas en su nuevo centro de distribución en Arizona y este se llenó. Entonces, tuvieron que alquilar contenedores para almacenar el exceso de inventario de figurillas cabezonas.
Para detener la pérdida de dinero, ahora resulta más económico deshacerse del producto que colocarlos en el mercado.
“Es tal la cantidad de Funkos que existen, de réplicas que nadie quiere porque se hicieron sin tener en cuenta que no había demanda para ese supuesto personaje famoso de medio pelo, que les sale más barato tirarlos en masa que tratar de venderlos”, apuntan desde Gizmodo. “Aunque no nos engañemos, la saturación por la creación de estos personajes cabezudos probablemente ha llegado”, agregan.
En el reporte, Funko informó que el año pasado registraron 1,300 millones de dólares en ventas netas, un aumento del 29% en comparación con 2021. Sin embargo, la utilidad neta disminuyó 108% en el mismo periodo: tuvieron pérdidas por 5.2 millones de dólares.
El precio de sus acciones fue en declive en noviembre de 2022, cuando se recortó la perspectiva financiera.
“Una combinación de factores macroeconómicos y problemas específicos de Funko interrumpieron nuestro desempeño financiero y operativo a un grado inaceptable”, comentó Mariotti en el informe.
La situación aún luce poco favorable, ya que la noticia provocó que el precio de las acciones cayera otro 25%.
