Innovar no es sólo crear un invento revolucionario, sino hacer mejoras a algo ya establecido o lograr un proceso más eficiente. “Implica salirte de la caja, no conformarte y buscar cómo dar el plus”, afirma César Islas, director del Capítulo Estudiantil de Tecnología, Innovación y Emprendimiento ( Cetiem ) de la UNAM.
Precisamente con el objetivo de romper con lo tradicional, Ulises Dávalos Huerta creó un negocio que está transformando lo que dice es una de las compras más importantes en la vida: el anillo de compromiso . Proveniente de una familia de joyeros, el emprendedor desarrolló una plataforma digital que permite personalizar esta joya y abre al consumidor un abanico de opciones en diseño y precios.
Se trata de Mianillo.com , un sitio por medio del cual los usuarios pueden elegir el tipo y forma de diamante, la montadura y hasta personalizarlo con una frase. Todo esto desde una computadora y con asesoría en línea, en donde expertos ofrecen información sobre tendencias, diseños, medidas, costos, entre otros.
Siendo el integrante más joven y con una visión enfocada a lo digital, Ulises decidió modernizar la empresa familiar. Al principio, se hizo cargo de la venta al mayoreo y de brindar atención a las tiendas departamentales. Fue cuando observó que para vender a través de estos canales externos, dependes de los demás para lograr la venta. “Quería quitar a esos intermediarios y ayudarle al mexicano a vencer el miedo que siente al entrar a este tipo de establecimientos”, dice.
Con el lanzamiento de Mianillo.com en 2015, “controlo la venta, fabricación y entrega”, afirma. Además, le permite al usuario hacer su propio diseño, se reducen costos de distribución, almacenaje y pago de renta de locales, haciendo más accesible el producto. Los modelos van desde $3,200 y cuentan con un certificado de autenticidad avalado por la International Diamond Company y servicio de por vida.
“Teníamos un producto de muy buena calidad, así como oficinas en México, Nueva York y la India; es decir, los socios comerciales que nos permitían contar con una oferta única. Y no había mejor opción de hacer llegar nuestro producto de manera directa al cliente sino por medio del ecommerce, una tendencia con un crecimiento acelerado a nivel global”, explica Ulises.
El emprendedor invirtió $10 millones en el stock inicial de piedras y montaduras, así como en el desarrollo de la página y la estrategia publicitaria en Facebook y radio –donde incursionaron en un concurso con gran éxito–. “Esto nos ha ayudado a posicionarnos entre los más jóvenes”, agrega. Sin embargo, otro punto fundamental ha sido ganar la confianza de los clientes. ¿La clave? Una atención personalizada a través de su página Web y un servicio de envío eficiente de los productos.
Si bien cubre todo el país, la mayor actividad de Mianillo.com se concentra en la Ciudad de México y el área metropolitana, y Querétaro. Mientras que son las ciudades con centros joyeros, como Guadalajara y Taxco, a donde más trabajo le ha costado entrar. “Pero ahí también existe una oportunidad, pues cada vez los centros joyeros pierden más confianza y nosotros podemos ofrecerla”, comenta Ulises.
Basado en la experiencia del negocio familiar, el emprendedor sabe que al ser el anillo de compromiso una de las primeras joyas que compra una persona, los chicos no siempre tienen bien claro qué es un diamante o el oro, o cuánto deben gastar en ello. Además, desconocen la medida del?dedo de la novia. “Daban conmigo por recomendación. Entonces decidí transpolar esa confianza que ya teníamos a más clientela”.
La manera de lograrlo fue educando al consumidor a través de su página Web. Ahí, con gráficos, textos y videos se explican las características de un diamante, los metales y tendencias. La información se brinda de manera gratuita, se compre o no el producto en Mianillo.com. Asimismo, el sitio cuenta con una opción?de chat y un microscopio electrónico. Y si el cliente aún tiene dudas, lo pueden atender en las oficinas de la empresa en la Ciudad de México.
Por otro lado, Ulises apostó por las redes sociales para posicionarse mejor en un target integrado por hombres de entre 25 y 35 años del segmento C, C+. Hoy suma 13,000 fans en Facebook y un promedio de visitas de entre 350 y 400 personas diarias a su plataforma. Entre 50 y 70 interactúan y cierra tres ventas al día; cifras que han superado sus pronósticos, ya que pensaba alcanzar este nivel hasta los dos años de operaciones.
El emprendedor asegura que cuando planeó el negocio proyectó un ticket promedio de compra de $5,000, pero a la fecha es de $16,000. “En joyerías el mexicano se gasta entre $8,000 y $12,000 en el anillo, aunque hay un dicho que señala que debes gastar tres meses de tu sueldo en esta joya. Nosotros sugerimos de acuerdo a sus posibilidades y gustos, y no a esas teorías”, aclara.
Mianillo.com ofrece anillos de diamantes en todos los tamaños y, ante el buen recibimiento del mercado, analiza ampliar su oferta a otra clase de joyas. Asimismo, trabaja en el desarrollo de su app y pronto abrirá su show room porque, “al mexicano le gusta sentir lo que está comprando”, sentencia Ulises, quien agrega: “vamos a mantenernos fieles a nuestra promesa de venta: lo que compras es lo que te llega a tu casa y esa es nuestra principal apuesta”.
