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Cinemex Holdings USA, filial estadounidense de la cadena mexicana de Germán Larrea, se declaró en bancarrota en Estados Unidos por segunda vez en cinco años. El proceso judicial de quiebra se realiza bajo el Subcapítulo V del Capítulo 11 en el Tribunal de Quiebras del Distrito Sur de Florida. Ahora, la compañía busca reorganizar su estructura financiera, reducir pasivos y asegurar la viabilidad de su negocio a largo plazo.
Cinemex entró al mercado estadounidense en 2016, pero la caída en la taquilla y la transformación digital han puesto en duda su viabilidad fuera de México. La industria cinematográfica estadounidense no ha recuperado los niveles de asistencia previos a la pandemia, pues las plataformas de streaming han cambiado los hábitos de consumo.
En 2020, Cinemex ya había recurrido a la ley de quiebras en Estados Unidos durante la pandemia, cuando su deuda superaba los 100 millones de dólares y se planteó el cierre o venta de activos. En 2022, la cadena Cineworld (matriz de Regal) también se declaró en quiebra, mientras que AMC evitó el colapso con una reestructura de deuda.
Según documentos oficiales citados por Bloomberg, esta vez Cinemex reporta activos entre $100,000 y $500,000 dólares, y enfrenta deudas por alrededor de $50,000 dólares. La empresa anticipa presentar un plan de reorganización en los próximos meses y espera cumplir con los requisitos para salir del proceso en el tercer trimestre de 2025.
CMX Cinemas, operadora de Cinemex Holdings USA, asegura que durante el procesos de bancarrota seguirá operando sus 28 complejos y 311 pantallas en Estados Unidos. La empresa solicitó al tribunal autorización para cumplir con compromisos laborales y comerciales, garantizando el pago a proveedores, empleados y clientes sin interrupciones.
Cinemex planea pagar en su totalidad a todos los proveedores por bienes y servicios adquiridos durante el proceso, así como seguir cubriendo sueldos y prestaciones. Además, revisará su cartera de arrendamientos y buscará renegociar condiciones con los propietarios de sus locales, con el objetivo de mejorar su posición financiera y facilitar el crecimiento futuro.
Los programas de membresía, como CMX Rewards y CMX Passport, seguirán vigentes. La administración de Germán Larrea apuesta por fortalecer el balance general y asegurar la liquidez necesaria con reservas de efectivo y los ingresos por operación.
Germán Larrea Mota Velasco es uno de los empresarios más poderosos de México y presidente de Grupo México desde 1994. Bajo su liderazgo, esta empresa minera se convirtió en la más grande del país y una de las principales productoras de cobre a nivel mundial.
Además de la minería, Larrea ha diversificado sus negocios hacia el transporte ferroviario con Ferromex y Ferrosur, y la infraestructura. Su visión estratégica ha impulsado la expansión internacional de Grupo México, con operaciones en Estados Unidos y Perú.
En el sector del entretenimiento, Larrea es propietario de Cinemex, la cadena de cines mexicana que entró al mercado estadounidense en 2016. Aunque Cinemex enfrenta retos en EE. UU., sigue siendo un actor clave en la industria cinematográfica mexicana.
Reconocido por Forbes como el segundo hombre más rico de México, Larrea mantiene un perfil discreto, pero su influencia económica es enorme. Su gestión combina crecimiento empresarial con inversiones en sectores estratégicos, consolidándolo como un referente en el mundo de los negocios en México y Latinoamérica.
Aunque Cinemex Holdings USA se declaró en quiebra en Estados Unidos, las operaciones de Cinemex en México no están en riesgo por ahora. Mientras la filial estadounidense busca reorganizar su deuda y fortalecer su estructura financiera, la empresa mexicana seguirá operando sus casi 3 mil salas de cine en el país.
Cinemex es una de las principales cadenas del país y México tiene una de las tasas de asistencia al cine más altas en América Latina. Durante la pandemia, a pesar de las restricciones, el público mexicano mostró un rápido regreso a las salas, lo que generó importantes ingresos para la cadena.
Por tanto, la bancarrota de Cinemex en el vecino país no implica cierres inmediatos en México (y al parecer, tampoco en Estados Unidos), ni afecta los programas de lealtad o sus servicios.
Sin embargo, el entorno global sigue en transformación y la empresa deberá innovar para innovando para mantener su liderazgo en el mercado mexicano, enfrentar los retos que plantea el streaming y replantear su estrategia internacional.