Cuando Mark Zuckerberg decidió cambiar el nombre de su compañía de Facebook a Metaverso, cambiaron muchas cosas en el mundo digital. Algunas de ellas tuvieron un impacto más grande que otras, por ejemplo el crecimiento de inversión en el negocio de los NFTs, otras pasaron desapercibidas. En noviembre, Thea-Mai Baumann, una artista digital, perdió su cuenta de Instagram sin previo aviso.
Baumann, como muchas otras personas, se convirtió en usuario de Instagram en el 2012. En ese momento eligió como nombre @metaverse que también usaba para firmar sus trabajos artísticos. En el momento en el que Facebook anunció su cambio de nombre, Baumann se convirtió en la dueña de una propiedad de Internet sumamente valiosa.
La artista le comentó a The New York Times que le comenzaron a llegar ofertas de compra por mensaje. También le llegaron algunas advertencias, diciéndole que Facebook no se lo iba a comprar, simplemente iba a tomar el nombre. Eso fue lo que sucedió. El 2 de noviembre que intentó ingresar a su cuenta, apareció un aviso en el que le informaban que su cuenta había sido deshabilitada por fingir ser alguien más.
“Esta cuenta es una década de mi vida y de mi trabajo. No quería que mi contribución al metaverso se borrara de internet. Eso les sucede a las mujeres en la tecnología, a las mujeres de color en la tecnología, todo el tiempo”, comentó Baumann.
Baumann había trabajado en los metaversos desde el 2012 cuando abrió su empresa Metaverse Makeovers. Éste constaba de hacer diseños complicados en las uñas de los usuarios. Después escaló a incluir ropa, accesorios y más. Sin embargo, en el 2017 tuvo que cerrar y regresó a sólo ser artista.
Un mes después de que Baumann apelara a Instagram le llegó una disculpa y su cuenta volvió a estar en línea. Según un portavoz de Instagram, no sabían porque se había producido un error. Nunca aclararon si el problema tuvo que ver con el cambio de nombre de Facebook.
