Ai Lab School es un programa online de Inteligencia Artificial (IA) creado a finales del 2020 por Hugo Cen e Iván Lozano. Ambos emprendedores estuvieron en la octava temporada de Shark Tank México y vivieron una experiencia intensa con muchos nervios, pero decidieron disfrutarlo mucho.
Este emprendimiento surge de una conversación entre Hugo e Iván, quienes se preguntaban: ¿Cómo puede progresar México? Y como un eureka o epifanía reconocieron de inmediato que la manera más rápida para que México pueda desarrollarse económicamente es mediante la innovación y la tecnología.
Con esa visión clara vieron lo que se requiere: programadores en la industria de la Inteligencia Artificial. Así fue como hace dos años supieron que la ia iba a ser la vertical tecnológica de más alto crecimiento en el futuro. Por tanto, decidieron enfocarse en especializarse en un programa de formación de Inteligencia Artificial (IA).
“Empezamos con un curso de IA para programadores y ya vamos en la generación número siete. Hemos crecido por la recomendación de boca en boca y también gracias a la promoción. Comenzamos con 20 estudiantes y ahora tenemos un promedio de 60 alumnos por generación”, expresa Hugo Cen, cofundador de Ai Lab School.
Hugo Cen, cofundador de Ai Lab School.
Estos emprendedores buscan democratizar la educación, es decir, actualmente tienen una inscripción aproximada de $8,000 por estudiante que comprende los nueve meses del programa. Lo que quieren es bajar el costo de su curso a algo simbólico: $1,500 a través de patrocinios de empresas en forma de becas no sólo para programadores, sino para todos.
El programa online de Inteligencia Artificial de Ai Lab School está estructurado en tres etapas: capacitación (programación en Python, ciencia de datos y machine learning), prácticas profesionales y reclutamiento en empresas tecnológicas. Esto último lo hacen a través de Talentum, una empresa hermana de Ai Lab School que está en Silicon Valley.
“Uno de los retos principales es actualizarnos constantemente en las nuevas tecnologías y eso traducirlo en un programa de calidad para nuestros estudiantes. El segundo desafío es cumplir esta promesa de que puedan tener trabajo una vez que terminan el curso”, señala Iván Lozano, cofundador de Ai Lab School, quien vive en San Francisco EE. UU.
El propósito de estos emprendedores es conectar al talento con startups. “Los países que no tengan desarrollo en Inteligencia Artificial se van a quedar obsoletos. Entonces, nuestra meta como compañía es ser ese escalón para que México y América Latina se posicionen como líderes en desarrollo tecnológico a nivel global”, menciona Iván.
Iván Lozano, cofundador de Ai Lab School.
Hacer una cosa todos los días. Eso genera substancia, esencia y el camino hacia el triunfo que estás buscando. Debes estar firme, constante, trabajando en tu negocio sabiendo que no es en vano.
Es fundamental escribir en papel tus metas, más allá de que estén en la computadora. De esta manera podrás verlos de forma diaria y tenerlos presentes en todo momento para que te recuerden lo que debes hacer.
Uno no puede hacer todo y se necesita un gran equipo para hacer una gran empresa. La comunicación es clave para lograrlo. En toda relación lo básico escucharse con atención y respeto.
Aplicar una metodología para hacer esta labor e ir ejecutando cada paso teniendo siempre una constante retroalimentación de tus usuarios. Ser flexible para dirigirse hacia alguna dirección que pidan tus clientes cuando necesitan que hagas algo diferente.
Es un consejo principalmente para los profesionistas jóvenes. Si sales y regresas como emprendedor serás más competitivo y tendrás una nueva visión de la vida.
Hugo Cen e Iván Lozano han visto el programa de Shark Tank durante años. Confiesan que haber estado ahí sí es un shock, pero muy positivo. Ellos llegaron solicitando $750,000 por el 10% de su empresa. Al final, entraron dos tiburones: Alejandra Ríos y Marcus Dantus con la inversión de $750,000 por el 20% de la compañía. Hugo e Iván acordaron una recompra del 10% de sus acciones en los próximos dos años.
