Independencia financiera y más, ¿el emprendimiento puede transformar vidas?
Optar por el camino del emprendimiento responde al panorama empresarial actual que experimenta una rápida evolución de constantes cambios. Los empresarios que deciden emprender un negocio propio se enfrentan a una travesía que no solo representa una oportunidad para materializar sueños y resolver problemas, sino también un desafío que requiere perseverancia, adaptabilidad y una mentalidad abierta para enfrentar la incertidumbre y los riesgos que conlleva.
Las motivaciones para que los emprendedores se embarquen en la aventura de iniciar con un negocio propio varían entre cada persona, sin embargo, existen tendencias en común que los impulsan a dar el primer paso. Los resultados recientes de la Encuesta Global de Emprendimiento 2024 de GoDaddy señalan que los tres principales catalizadores para que los emprendedores pongan en marcha su negocio son: la independencia financiera (26%), seguir una pasión (24%) y contar con una mayor flexibilidad (19%).
El impacto positivo del emprendimiento es claro. Un notable 92% de los encuestados está de acuerdo con que sus vidas han mejorado desde que emprendieron su viaje empresarial. Además, el 64% de los encuestados afirman que hasta la mitad de sus ingresos anuales proceden de las ventas en línea y el 95% de aquellos cuyo negocio es actualmente un ingreso complementario esperan convertirlo en su principal fuente de ingresos.
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Nunca es tarde para empezar a emprender y aunque no existe una edad ideal para ello, la encuesta revela una clara tendencia en donde los Millennials son la generación con más emprendedores con el 55%, seguidos de la GenX (23%), GenZ (16%) y finalmente Baby Boomers (17%).
Y es que para poder emprender se necesita energía, tiempo y dinero que tanto las generaciones más jóvenes como las más viejas batallan más para conseguir.
Tener una preparación académica que permita a los emprendedores realizar un plan estratégico para crecer su negocio es un factor importante que la encuesta señala, pues el 38% de los encuestados posee un nivel de estudios universitario o menos, el 50% completó la universidad y el 12% realizó estudios de posgrados.
La etapa inicial de un negocio conlleva numerosos desafíos que pueden poner a prueba incluso a los empresarios más resilientes. Los principales obstáculos a los que los emprendedores se enfrentan al empezar son el marketing de su negocio en línea (57%), el acceso al capital (25%) y el marketing a través de métodos tradicionales (24%).
Dado que estos obstáculos requieren una distribución estratégica de los recursos para ser superados, es crucial manejar el capital de manera eficiente, priorizando gastos y buscando maneras innovadoras de financiar el crecimiento sin comprometer la viabilidad del negocio. La habilidad para presentar un plan de negocios sólido y convincente es clave para asegurar los recursos para cubrir las necesidades básicas de la empresa. Los emprendedores encuestados destacaron que sus primeras inversiones fueron destinadas al equipamiento (20%), marketing online (17%) e inventario (16%).
A medida que los negocios crecen, los retos se transforman de acuerdo con las nuevas necesidades de los consumidores. En la actualidad, los encuestados revelaron que su principal desafío son los problemas relacionados con los clientes con 46%, seguido del marketing (30%) y el equilibrio entre trabajo y vida personal (24%).
Los dueños de los negocios tienen que ser capaces de adaptarse al entorno empresarial vibrante y dinámico en el que hoy en día resulta fundamental contar con una presencia digital. Los cambios pueden llegar en cualquier momento y los emprendedores deben de estar listos para superar la marea de transformación.
Esto cobra mayor importancia si se analiza que el 70% de los negocios encuestados llevan funcionando cinco años o menos.
Sin dejar de lado las necesidades tradicionales del negocio, las inversiones recientes van más alineadas con las nuevas tendencias tecnológicas que les permiten tener una mayor presencia digital. Estos fondos fueron dirigidos al marketing digital (20%), equipo (19%) y desarrollo de nuevos productos (16%). Para los emprendedores, esta transición hacia un enfoque más centrado en lo digital puede ser la clave para desbloquear nuevas oportunidades de crecimiento y mantener el éxito a largo plazo. Dicho de otra manera, el emprendimiento puede mejorar vidas.
La experiencia y el conocimiento de mentores y asesores pueden proporcionar orientación valiosa que puede prevenir errores comunes y costosos. Aceptar ayuda y tutoría no solo brinda conocimientos y conexiones clave, sino que también ofrece apoyo emocional y una perspectiva externa que son esenciales para el éxito y la sostenibilidad de un nuevo negocio. El 62% de los emprendedores mexicanos reconoce estar en busca de tutoría.
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En conclusión, emprender en el contexto empresarial actual ofrece una oportunidad excitante y desafiante para aquellos dispuestos a dar el salto. Aunque el camino del emprendimiento puede estar lleno de incertidumbres y adaptarse a la transformación digital resulta crucial para prosperar en un mundo cada vez más dinámico y competitivo, la satisfacción personal y el potencial de crecimiento hacen que el esfuerzo valga la pena.
¿De cuáles otras maneras el emprendimiento puede impactar vidas?
